México envió este lunes 9 de octubre una nota diplomática a Estados Unidos para reclamar por las afectaciones económicas causadas por el cierre de pasos fronterizos desde el vecino del norte: Tijuana, Baja California con San Diego, California; Ciudad Juárez, Chihuahua con El Paso, Texas; y Piedras Negras, Coahuila con Eagle Pass, Texas.
La cancillería detalló en un comunicado que el comercio bilateral entre ambos países está siendo afectado tras interrumpirse el paso por tres puentes internacionales desde mediados de septiembre pasado.
El primero de ellos es el Puente Internacional Córdoba-Las Américas (BOTA), seguido por el Puente Internacional Piedras Negras-Eagle Pass I, así como el cierre del cruce peatonal (PedWest) en el puerto de entrada El Chaparral-San Ysidro.
“El gobierno de México solicita restablecer el flujo de comercio a través de los cruces fronterizos”, refiere el documento.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, había anunciado en su conferencia de prensa matutina una nota diplomática para responder a estas acciones. Dijo que tienen “propósitos politiqueros” ante las elecciones en Estados Unidos de noviembre próximo.
“Están obstruyendo las aduanas, el libre tránsito de mercancías (…) perjudican a las dos naciones, perjudican la actividad económica, comercial y desde luego el tránsito normal de las personas”, indicó el mandatario.
LOS PASOS FRONTERIZOS CERRADOS Y LAS REVISIONES EXHAUSTIVAS A CAMIONES DE CARGA
El comunicado de la cancillería detalló que el 14 de septiembre pasado se cerró un paso peatonal que comunica a Tijuana con la estadounidense San Diego. En tanto, el 20 del mismo mes se suspendieron los cruces en un punto de Piedras Negras) hacia la vecina Eagle Pass, Texas.
Un cruce más, de Ciudad Juárez hacia la estadounidense El Paso, se cerró el 18 de septiembre. Sin embargo, será reabierto este martes 10 de octubre tras una negociación entre ambos países, añadió la dependencia.
México también protestó por las “revisiones exhaustivas a los camiones de carga” que realizan autoridades de Texas en tres cruces fronterizos. Piden la mediación de Washington para detener estas acciones.
Ambos países comparten una frontera de casi 3,200 kilómetros. Estados Unidos es el principal socio comercial de México, al ser el destino del 80 por ciento de sus exportaciones, la mayoría de las cuales llegan por tierra.
El gobierno de López Obrador también pidió la intervención de la Casa Blanca para que Texas, gobernada por el republicano Greg Abbot, retire las boyas instaladas en el fronterizo Río Bravo. Lo anterior, para impedir el paso de migrantes y en las que han sido hallados al menos dos cuerpos. N