Por decreto, el gobierno estatal eliminó el cobro en las casetas de la carretera escénica Tijuana-Playas de Rosarito, mismo que entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el periodico oficial.
Actualmente, viven cerca de 12 mil personas en ese tramo carretero, que tiene una extensión de 18.5 kilómetros, y no existen vías alternas libres de peaje.
Según el decreto, Caminos y Puentes Federales (CAPUFE) otorga un apoyo para los residentes de las áreas desde Rancho del Mar hasta Real del Mar, con un descuento del 50 por ciento del importe del peaje.
Pero el gobierno estatal consideró que dicho apoyo ha tenido “un impacto social muy pequeño”, además de que está limitado a los residentes de esos desarrollos.
CAPUFE y el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (BANOBRAS) son los concesionarios del tramos carretero, situación que no aparece publicada en el diario Oficial de la Federación.
Actualmente se cobran 39 pesos en cada caseta por automóvil. Una familia que tiene dos autos estaría gastando alrededor de mil 092 pesos por semana, solo para salir de sus hogares y regresar.
Si se calcula el tránsito de los 10 mil vehículos de los residentes del tramo carretero, representan 5 millones 460 mil pesos semanales.
Por eso, el gobierno de Baja California consideró que luego de 40 años de operación, los inversionistas ya recuperaron su inversión.