“Tratamos de ayudar en días en los que otros no lo hacen”: Delina González
Es Navidad. Es tiempo de compartir, dar, recibir. Y también de cumplir los sueños. A veces los propios y, mejor aún, los ajenos.
Tal como lo ha hecho Delina González, quien desde una asociación ayuda a cumplir los sueños de niños que padecen enfermedades que amenazan sus vidas.
Aunque cada uno de los sueños que han logrado hacer realidad son especiales, Delina cuenta que hay dos que la llenan de emoción. “El primero fue con Laura, ella tenía 11 años y lo único que quería era conocer a los integrantes de la Marina de México. Obtuvimos el teléfono y me pasaron con un teniente quien me dijo que sería un placer apoyarnos porque él había tenido un hermano enfermo y en Estados Unidos le hicieron un deseo realidad, entonces me dijo que ahora a él le tocaba dar lo que a ellos le dieron. Laurita viajó a Veracruz, recibió los honores marinos que solo reciben el presidente y los altos mandos. Fue un deseo mágico, pero lo que realmente quería la niña era saber por qué los marinos tenían los zapatos tan limpios”.
Delina comenzó en esto del voluntariado por una cuestión de suerte, quizá. Ella era de las personas que apoyaban una vez al mes o una vez al año a alguna asociación, y un día trabajando (es traductora) salió un mensaje en internet sobre una fundación que cumplía deseos para niños enfermos en Estados Unidos y necesitaba una traductora. Mandó una solicitud, pero no quedó; “entonces vino esta parte de mejor ser voluntaria. A veces uno tiene ganas de hacer, pero no sabe para dónde. Así empecé yo, tenía tantas ganas y me llegó el momento”.
Fue así como con otras amigas, que también ya realizaban voluntariado, se juntó y formó la asociación sin fines de lucro DAR, A. C., la cual se puso de propósito crear momentos de alegría y esperanza, cumpliendo sueños de niños y jóvenes que padecen enfermedades que limitan y amenazan sus vidas. Con esto ayudan, en gran medida, a su recuperación emocional.
El pequeño equipo de Delina busca de todas las formas posibles (venden pulseras, piden donativos, realizan llamadas) lograr los sueños de los niños, los cuales pueden ser desde una tableta electrónica hasta conocer a Justin Bieber (una pequeña niña logró conocer a este artista gracias a que una asociación en Estados Unidos logró darles el contacto). “Este año será la segunda vez que llevaremos cinco niños con toda su familia a Disney; aunque no lo creas, la mayoría de los pequeños no sueña con eso, sino con ir a la playa o a Chapultepec.
Mexicanos que llevan la Navidad a quienes más lo necesitan
“El segundo sueño que más me ha emocionado —relata Delina—, fue el que le realizamos a Benjamín, de ocho años. A él no nos tocaba conocerlo, íbamos pasando por los pasillos del hospital, lo vimos y comenzamos a platicar con él. El deseo de Benjamín era ser policía y quería tener un PSP (Play Station Portable). La Policía Federal siempre se ha portado muy hermoso con nuestros niños y esta no fue la excepción. Tuvo su día mágico, se subió a la moto y, al otro día, curiosamente, fue el Día del Policía, por lo que lo invitaron, lo hicieron policía honorario y conoció al presidente. Ahí mismo le dimos su PSP y él estuvo feliz, aunque estaba muy enfermo. Varios meses después, recibí una llamada de su abuelita. Ella me dijo que él había fallecido y que le había pedido que nos regresara el PSP porque quería que otro niño lo disfrutara porque él ya no iba a poder hacerlo… A mí se me cayó el mundo al escuchar eso, nunca nadie nos había regresado nada. A la semana, llegó la abuelita y nos dio el PSP, y días después, un chiquillo nos lo pidió y fue hermoso porque logramos darle cierre al deseo de Benjamín”.
Desde hace cuatro años, en estas épocas navideñas Delina y el grupo de voluntarios que dirige llevan juguetes a niños de diversos hospitales donde muchas personas no tienen tanto acceso para poder llevar algo.
“Tratamos de que sean en días en los que otros no van y tratamos de llevar juguetes para todos, lo cual se vuelve un reto. Lo que queremos es que cada paciente reciba uno dependiendo de su edad y que a un chico de 19 no le vaya a tocar un obsequio para uno de tres”.
En DAR, recalca Delina, hay colegios que nos han apoyado para realizar distintos sueños, y en diciembre también nos ayudan juntando juguetes; incluso ha habido veces en que los alumnos nos acompañan para que puedan ver de cerca lo que sus acciones provocan en los demás: “Hacer esto (el voluntariado) te va a dar tantas cosas, tantos momentos que de verdad te va hacer que valores lo que tienes y lo que puedes dar”.
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Si quieres apoyar a DAR, A. C. puedes contactarlos en su página de Facebook o en su sitio web: http://darmexico.org/.