El gobierno de Donald Trump canceló los permisos de residencia provisionales de alrededor de 200,000 salvadoreños que han vivido en Estados Unidos desde al menos 2001, dejándolos vulnerables a la deportación, según se desprende de una copia de un anuncio del Departamento de Seguridad Nacional enviado a los legisladores estadounidenses.
La administración notificará a los salvadoreños que tienen hasta el 9 de septiembre de 2019 para abandonar los Estados Unidos o que encuentren una nueva forma de obtener la residencia legal, refiere el documento al cual tuvo acceso The Washington Post.
A los salvadoreños se les otorgó lo que se conoce como Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés), luego de una serie de terremotos que devastó el país en 2001.
De acuerdo con la declaración del DHS enviada a los legisladores, el secretario Kirstjen Nielsen determinó que las condiciones en El Salvador han mejorado significativamente desde entonces, poniendo fin a la justificación original que dio cabida al TPS.
“Solo el Congreso puede legislar una solución permanente que aborde la falta de un estatus migratorio legal duradero de aquellos actualmente protegidos por TPS que han vivido y trabajado en los Estados Unidos por muchos años”, dice el anuncio citado por el Post.
El mismos reporte indica que los 200,000 salvadoreños en riesgo de ser deportados son los padres de aproximadamente 190,000 niños nacidos en Estados Unidos.
El Secretario Nielsen se reunió recientemente con el Ministro de Relaciones Exteriores de El Salvador y el Embajador en los Estados Unidos, y habló con el Presidente Sánchez Cerén, de acuerdo con el anuncio enviado a los legisladores.