Uno de los nuevos cultivos en los
que Calvillo incursionó es el aguacate Hass, variedad de la que por lo pronto
se sembraron tres hectáreas con una expectativa de rendimiento de 40 a 50
toneladas por ciclo, dijo en entrevista el titular de la Secretaría de
Desarrollo Rural y Agroempresarial (SEDRAE), Manuel Alejandro González Martínez.
“Es un ejercicio a largo plazo
porque son árboles que hasta el segundo o tercer año empiezan a producir ya más
en forma, de aquí en delante tenemos que promover esa reconversión y ver
resultados en siete, diez años”
Luego de esta primera
experiencia, los productores se dieron cuenta de que en Calvillo el tiempo, el
clima y el suelo son propicios para la producción de este tipo de aguacate.
La intención de las autoridades
del sector agroalimentario es promover la reconversión, no sólo de este
producto, sino de otros 13 cultivos. En particular, la producción de aguacate
Hass de Calvillo no se está visualizando para la exportación porque en realidad
Michoacán tiene más capacidad para el mercado nacional e internacional.
“En el caso de Michoacán la
verdad es que por mucha producción que hay no están dando abasto para la
demanda nacional e internacional que hay, hoy en día, somos el principal
exportador de aguacate del mundo y aún así hay muchísima más demanda”.
Los espacios que en Calvillo se
están usando para la siembra de aguacate son los que quedaron abandonados,
luego de la disminución en la producción de guayaba.
De acuerdo al registro de SEDRAE,
había 6 mil hectáreas de huertas de guayaba de las cuales al parecer quedaron 3
mil 500 hectáreas y el resto son las que están usando para cultivos de aguacate
y hortalizas.
El titular de SEDRAE argumentó que la producción
de Aguascalientes no tendrá efecto en el precio al público del aguacate, que está
entre 65 y 70 pesos el kilo, porque en realidad no será muy significativa
comparado con los que se produce para exportación.