Los diseños
originales de los emojis, esos dibujos que tanto se utilizan en los mensajes por
celular, serán presentados en la entrada principal del Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA) de diciembre de 2016 a
marzo de 2017. Y no hay duda; es el lugar más visible y de mayor prestigio para
lucirse.
El museo, que incluye obras de artistas influyentes de
los últimos dos siglos, adquirió las 176
ilustraciones diseñadas hace casi dos décadas y que revolucionaron la comunicación.
Además del primer emoji inspirado en la popular carita feliz, también está el gato asustado, el corazón roto y la
mano saludando.
En honor a la verdad, no se trata de dibujos de una
gran exquisitez gráfica; los trazos son
sencillosy están pixeleados, pero es justo en donde radica el valor
de su antigüedad e historia.
Se cuenta de estas imágenes que en 1999, el japonés Shigetaka Kurita presentó 176 ilustraciones a la empresa
de telecomunicaciones NTT DoCoMo como respuesta a la solicitud de pictogramas sencillos que
reemplazaran palabras escritas, para un mercado de telefonía celular en franco
crecimiento pero limitado espacio en las pantallas de los equipos.
Ya para su versión moderna, Kurita se inspiró en los
mangas (las historietas japonesas), caracteres chinos y en la señalización de
las calles. Con la tecnología actual, ver los diseños de12 pixeles de los emojis originales da la sensación de
estar leyendo pictogramas de una civilización antigua.
Algunos de los dibujos originales de Kurita siguen siendo un misterio a menos que
se busque su sentido en internet; círculos de colores, puntos dispersos, un
caballo de madera y figuras que para ser descifradas exigen una capacidad de
abstracción superlativa.
“Los emojis son una muestra poderosa de la capacidad
que tiene el diseño para alterar el
comportamiento humano”, sostiene Paul Galloway, especialista del departamento
de arquitectura y diseño del MoMA.
Los números ilustran el peso de la influencia de estos
dibujos; según una encuesta del sitio Statista de 2013, 74 por ciento de los estadounidenses ya utilizaba emojis todos los
días, y en 2015, el mismo número de estadounidenses aceptó que recurrían a los
emojis porque “les ayudaban a expresar su mensaje de forma más exacta”. En un
mundo con más de dos millones de
celulares, los mensajes de texto han reemplazado las conversaciones
habladas, y los emojis, a las emociones.