Lo que debería de ser una de las actividades más sencillas para cualquier persona, es una de las más difíciles para el 45 por ciento de la población mundial: dormir. De acuerdo con la Asociación Mundial de Medicina del Sueño (WASM, por sus siglas en inglés), los problemas de sueño constituyen una epidemia global que amenaza la salud y la calidad de vida, ya que aumenta las probabilidades de padecer enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y depresión.
Especialistas de la Clínica de Trastornos del Sueño de la UNAM mencionan que los cinco problemas más comunes para los mexicanos son el insomnio, el sonambulismo, la narcolepsia, los terrores nocturnos y la hipersomnia.
El insomnio, problema que aqueja a más del 40 por ciento de la pobalción en México, consiste en la dificultad para conciliar el sueño o el hecho de despertar varias veces durante la noche. Este malestar es más frecuente en las mujeres que en los hombres –en una proporción
de dos por uno– debido a factores fisiológicos y psicológicos.
Durante la fase de sueño profundo, algunas personas caminan o realizan actividades estando dormidas. Llamado sonambulismo, este padecimiento suele presentarse en las primeras horas de la noche. La hipersomnia, por otra parte, se refiera al hecho de dormir más de ocho horas al día y, sin embargo, sentirse cansado.
La narcolepsia es un trastorno de sueño crónico que
afecta al sistema nervioso central y se caracteriza por episodios incontrolables
de sueño en cualquier sitio o en cualquier momento, especialmente en horas
diurnas. Afecta a una de cada 2 mil
personas; la somnolencia puede
persistir durante largos períodos de tiempo y el sueño en las horas de la noche
puede ser fragmentado al despertarse frecuentemente.
Por último, los terrores nocturnos en los niños y adolescentes están relacionados con el uso de dispositivos
electrónicos hasta altas horas de la noche, mientras que en los adultos suelen vincularse a la presencia de otras enfermedades o a la combinación de
medicamentos.