La desnutrición y otras enfermedades infecciosas afectan también a pobladores de
comunidades indígenas de Guadalupe y Calvo, particularmente las más alejadas y de
difícil acceso como Choreachi y Coloradas de la Virgen.
Víctor Martínez, director de programas de la asociación Alianza Sierra Madre, A.C.
informó que en el Norte de ese municipio, en las comunidades mencionadas, “sí se dan
casos de desnutrición importante debido a que la producción alimentaria no es fácil, la
gente vive de lo que siembra y lo que producen no les alcanza para todo el año”.
Además, dijo, también se tiene registro de enfermedades gastrointestinales debido a la
dificultad que enfrentan los habitantes para conseguir agua limpia para consumo ya que
en algunos casos, la fuente de abastecimiento se encuentra a una hora de camino o más.
“Las enfermedades más frecuentes son las relacionadas con la pobreza; infecciones
gastrointestinales y de vías respiratorias dependiendo de la época del año”.
Martínez agregó que el agua limpia es una de las necesidades más apremiantes ya que
no se trata nada más de que tengan líquido para beber o preparar alimentos, sino
también para el aseo personal.
“Más que construir fosas sépticas o algún otro medio de disposición de desechos, que
tengan la posibilidad de aprovechar el agua para hacerla llegar a su casa; a veces es tan
complicado acarrearla que sólo la usan para hacer comida y no se lavan las manos lo
que redunda en problemas de salud”.
El entrevistado explicó que durante los últimos 5 años la agrupación ha trabajado
fuertemente en materia de sustentabilidad alimentaria, además de instalar varios
sistemas de agua aunque aún no se cubren todas las necesidades.
“Hemos llegado hasta Baborigame y trabajado en 20 localidades de los alrededores,
pero hay algunos puntos a los que no tenemos acceso debido a la violencia que
prevalece y se nos dificulta llegar porque se pone en riesgo al personal”.
Al momento, dijo, aproximadamente 3 mil personas de 600 familias se han beneficiado
con actividades como producción de huevo, carne, hortalizas y huertos frutales de
traspatio.
De enero a marzo del 2016 se han construido 8 invernaderos destinados a producir
alimentos en el mismo número de localidades de Guadalupe y Calvo, informó Víctor
Martínez. Dijo que el objetivo es producir hortalizas de cilantro, cebolla, ajo, acelga,
chile y repollo, entre otras, para complementar la dieta de los pobladores.
“Terminamos la instalación de estos invernaderos porque no queremos que el frío sea
una limitante en la producción de alimentos. Se contrataron especialistas en la materia
que se encargaron no sólo de generar la infraestructura necesaria sino de capacitar a las
personas para que puedan trabajar”.
De los 8 invernaderos, agregó, uno ya está empezando a producir mientras que los
restantes se encuentran en proceso.
“Estuvimos trabajando con un programa en el que tuvimos algunos apoyos oficiales y
ahora que se termina, estamos buscando financiamiento para dar seguimiento a las
familias que se interesan en seguir produciendo. No vamos a dejarlos solos”.