El presidente sirio Bashar al Asad rechazó las acusaciones de la ONU contra su régimen por crímenes de guerra, a las que atribuyó motivaciones “políticas”.
La ONU acusó al régimen sirio de atrocidades como “el exterminio” de presos, pero el mandatario dijo el jueves que esas denuncias “obedecen a una agenda política (…) y carecen de pruebas”.
En entrevista exclusiva para la agencia AFP, Asad afirmó que Europa debe crear las condiciones para permitir el retorno de los refugiados a su país y se dijo dispuesto a negociar con la oposición, sin dejar de combatir contra los grupos insurgentes armados.
“Voy a pedir a los gobiernos europeos que contribuyeron directamente al éxodo (de los refugiados sirios) cuando crearon una cobertura para los terroristas y un embargo contra Siria, que ayuden a los sirios a volver a sus casas” afirmó, y agregó que “desde el inicio de la crisis, creímos firmemente en las negociaciones y en la acción política. Sin embargo, negociar no significa detener la guerra contra el terrorismo. Los dos aspectos son indispensables en Siria (..). El primero es independiente del segundo”
Reconquistar Siria
Bashar al Asad se declaró decidido a retomar el control de toda Siria, pero predijo que los combates contra los rebeldes que buscan derrocarlo desde hace cinco años pueden ser “largos”.
“No es lógico decir que haya una parte de nuestro territorio a la que renunciaremos”, declaró en una entrevista exclusiva con la AFP realizada el jueves, la primera desde el fracaso el mes pasado de una amplia ofensiva militar en la región de Alepo (norte) respaldada por bombardeos de la aviación rusa. “Que seamos capaces de hacerlo o no, es un objetivo que buscaremos sin dudar”, respondió cuando se le preguntó si se consideraba capaz de retomar el control de todo el país.
Con información de AFP