Hace más de cuarenta años, Clarence Schultz despertó completamente ciego del ojo derecho. Veinte años después perdió la visión del izquierdo. Los médicos diagnosticaron oclusión de la vena retiniana, padecimiento raro que termina por ocasionar ceguera. Hoy, el veterano de Marina, de ochenta y un años, ha aprendido a caminar con bastón, pero aún tiene dificultades para desplazarse por su vecindario y realizar tareas cotidianas sin ayuda, sobre todo desde la muerte de su esposa. Eso lo convirtió en el candidato perfecto para probar el BrainPort V100, dispositivo de baterías que ayuda a los invidentes a procesar imágenes visuales y tener una idea más clara de su entorno usando la lengua.
Se trata de una videocámara montada en unos espejuelos que tienen un elemento que se introduce en la boca; y esa parte del aparto contiene cuatrocientos electrodos que el usuario coloca en su lengua. Cuando el dispositivo captura imágenes con la cámara, transmite la foto como señales eléctricas que la pieza bucal comunica como vibraciones. BrainPort V100, recién aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos, produce lo que el fabricante describe como “patrones móviles, semejantes a burbujas” —una bocanada de efervescencia— en la superficie de la lengua, lo que permite que el usuario “vea” la forma y el contorno de los objetos a través de la sensación de cosquilleo. Los pixeles de color claro se perciben como un estímulo fuerte, los pixeles grises producen estimulación media y los pixeles negros no producen estímulo alguno.
“Sentí la oscuridad comparada con la luz”, dice Schultz, quien probó el dispositivo durante seis meses. “Pude contar las entradas de cocheras. Cuando llegué a una intersección, pude ver que aparecía el borde del camino.” La cámara opera en diversas situaciones de iluminación e incluso tiene una característica de zoom. Con el debido entrenamiento, el usuario puede aprender a utilizar el dispositivo para percibir la ubicación y posición, el tamaño y la forma de los objetos, y determinar si están fijos o en movimiento. Si bien fue diseñado para utilizarse en combinación con un bastón o perro guía, Schultz dice que a la larga podría desplazarse fácilmente hasta la iglesia usando sólo el dispositivo. “Terminas por acostumbrarte.”