QUERÉTARO,
Qro.- “Pancho es un hombre violento, corrupto, mentiroso y de
escándalos. No permitamos eso en Querétaro”, reza en el reverso de un volante
encontrado en una calle de la colonia Villas del Sol, en el área metropolitana
del estado. La “guerra sucia” es una estrategia que busca ganar o conservar el
poder.
En el transcurso de la jornada electoral en Querétaro, donde hoy se decide
si repite el Partido de Revolución Institucional (PRI) o regresa al poder el
Partido de Acción Nacional (PAN), Newsweek en Español pudo comprobar la
existencia de propaganda electoral anónima con contenido negativo hacia otros
candidatos en distintos puntos de la ciudad.
“Este es el verdadero Pancho
Domínguez”. En dos cuartillas a color se enumeran presuntos actos de corrupción
del candidato panista a la gubernatura queretana, Francisco Domínguez, alIas
“Pancho”. En el texto citan las fuentes de algunos de los periódicos que
cubrieron notas sobre éste durante todo el año. También avisan que “este
material no es guerra sucia, es solo una parte de toda la información auténtica
disponible en varios medios de comunicación reconocidos”.
Los rivales del candidato del PAN
llevan difundiendo estos volantes apócrifos más de un mes. Estos mensajes
calumniosos van en contra del partido y de la figura de Pancho Domínguez y
han sido entregados en distintas colonias de la ciudad.
Desde la dirección del Partido
denunciaron estos hechos que ya fueron notificados al Instituto Electoral del
Estado de Querétaro.
Otros
volantes.
Abraham
Hernández Sánchez, un elector de la colonia Candiles, recogió hace unos días un
volante en la calle que iba contra el candidato municipal del PRI del municipio
de Corregidora. Se trataba de un folleto a color de cuatro páginas en donde se
acusaba al candidato Javier Ortega de tener relación con políticos “corruptos”.
Hernández Sánchez menciona también
que imprimieron un volante contra el diputado local del PAN, Antonio Zapata,
actualmente presidente municipal con licencia de Corregidora. El folleto
imitaba un pagaré en el que se decía que ese municipio había solicitado un
crédito y como no se había pagado, “la gente debía pagar 4 mil pesos del pagaré
por las obras del préstamo”.
La guerra sucia o campañas negativas
han estado a la orden del día durante esta contienda electoral de 2015 para
atacar directamente al oponente, a sus políticas, sus programas o su persona.