Su nombre real era Carlo Pedersoli, mejor conocido en el
mundo del cine como Bud Spencer, quien también fue un destacado nadador que
ganó siete títulos nacionales, y que descubrió su gusto por el cine accidentalmente,
falleció ayer a los 86 años.
“Con profundo dolor anunciamos que Bud se fue para su último
viaje”, tuiteó ayer la familia del actor, nacido en el barrio de Santa
Lucía en Nápoles, el 31 de octubre de 1929.
Como parte del desplazamiento forzado que vivió junto con su
familia luego de la Segunda Guerra Mundial, vivió en Río de Janeiro, Brasil, donde
trabajó como obrero y bibliotecario. Cuando regresó a Roma continúo con las
competencias de natación y tuvo participaciones mínimas en las
cintas Quo Vadis y Adiós a las armas.
Su primer western
spaghetti fue grabado cuando tenía 39 años, en 1967, después de casarse con
la hija de un productor cinematográfico. El filme que llevaba por nombre Dio perdona, Io no llegó a varios países
traducido como Tu perdonas, yo no. Ahí
fue cuando decidió cambiar su nombre a Bud Spencer, haciendo una mezcla entre
el nombre de la cerveza y el del actor Spencer Tracy.
En 1970 con Lo
chiamavano Trinita (Me llaman Trinity),
que logró gran éxito en Europa y Latinoamérica, hizo un personaje de aspecto
rudo pero de gran corazón, defensor de viudas y huérfanos, con una sonrisa un
tanto boba y características físicas sorprendentes, dado a su gran tamaño. A
partir de allí, coprotagonizó 19 películas con el actor Terence Hill
Spencer concluyó su carrera cinematográfica en 2004, con Cantando dietro i paraventi (Cantando detrás del parabrisas), para
entrar en el mundo de la política en 2006, con una candidatura en las
elecciones regionales co
mo parte del partido de Silvio Berlusconi. Perdió en las urnas.
