Uno
de los últimos bosques vírgenes de Europa, Bialowieza ha comenzado a ser talado
por el gobierno ultraconservador de Ley y Justicia (PiS) de Polonia, con el
argumento de que el espacio está siendo amenazado por una plaga de escarabajos.
A
pesar de que el bosque, hogar del bisonte europeo, fue declarado reserva de la
biósfera por la Unesco, el PiS señala que la tala servirá “para detener su
degradación”.
Organizaciones
ecologistas como Greenpeace, WWF y Client Earth, además de miembros de la Comisión Europea, han expresado su preocupación
por esta medida que podría acabar con un ecosistema virgen desde hace más de 10
mil años.
Bialowieza
ocupa parte del territorio de Polonia y Bielorrusia, es único en su género, por
lo que Polonia recibe fondos europeos destinados a su conservación. El último bisonte
de la reserva murió en 1919, pero dos años después la especie fue reintroducida
con éxito.
De
acuerdo con Konrad Tomaszewski, director de Bosques Nacionales, la tala de 180
mil metros cúbicos de madera en zonas no protegidas pretende también proteger
la vida y la salud de la población local y combatir el riesgo de incendios.