La escuela primaria Amado Nervo, ubicada en el municipio de Jesús María, dejó se recibir a sus alumnos por las fallas estructurales que fueron denunciadas por madres y padres de familia. La mayoría de los estudiantes encontraron un nuevo espacio para recibir clases, en una propiedad de la iglesia local, mientras que otros fueron reubicados en otro plantel.
Maestros de esta institución contaron que las fallas en la infraestructura educativa tienen más de 10 años, sin embargo, se hicieron aún más evidentes tras el sismo registrado en Aguascalientes el pasado 19 de septiembre de 2022.
“Se nos atoraban las puertas, las ventanas, se nos caían pedazos de un salón, se nos cayó una barda en el tiempo de lluvias, pero todo se arreglaba y volvíamos a trabajar normalmente, pero la escuela tuvo más fallas, se agrietaron más los salones y se veían más fisuras en las paredes”, contó una de las educadoras.
Para el mes de febrero, cinco de los once docentes recibieron la instrucción de desalojar sus aulas debido al riesgo de un derrumbe, por lo que comenzaron a dar clases en las canchas del plantel. A los pocos días, todos los alumnos tuvieron que abandonar la escuela y retomaron las clases en línea.
Después de notar que no todos los estudiantes tenían la posibilidad de seguir su educación vía internet, los maestros se vieron orillados a regresar a los salones únicamente para entregar las tareas y trabajos en cuadernillos, a fin de que los menores realizaran las actividades en sus casas.
Ante la problemática, varios padres y madres solicitaron al Instituto de Educación de Aguascalientes (IEA) los recursos necesarios para rehabilitar la primaria, sin embargo, la petición atrajo una serie de revisiones por parte de peritos, quienes determinaron que la escuela no era apta para recibir a los alumnos.
Cabe señalar que la primaria se encuentra en la colonia Benigno Chávez, donde las fallas geológicas son evidentes, especialmente en calles y banquetas.
El Curato, escuela temporal
Durante tres semanas, las actividades de la escuela pararon totalmente, hasta que los responsables del la Parroquia Jesús Nazareno permitieron que los estudiantes continuaran con sus clases en una de sus propiedades, ubicada a un costado del templo, en la zona centro.
Tal propiedad, conocida como El Curato, es comúnmente utilizada como notaría y para celebrar varias actividades religiosas a lo largo del año. Cuenta con varios espacios que fueron adaptados como salones, con pizarrones y algunas bancas. También tiene una cancha techada y baños.
Pese a los esfuerzos de los docentes por seguir con el ciclo escolar, reconocen que los alumnos han dejado de asistir a clases, debido a la nueva distancia que deben recorrer y a la incertidumbre por el futuro de la primaria Amado Nervo.
Actualmente, los alumnos de primero a quinto grado, que conforman nueve grupos, están tomando clases en El Curato, mientras que los estudiantes de sexto grado fueron reubicados en la primaria Buena Tierra, ubicada a unas cuadras de la plaza principal. Esa primaria es una de las más grandes de Jesús María, por lo que su población educativa también es mayor.
“Lamentablemente los grupos, de ahora que estamos pasando, de febrero a la fecha, los grupos ya se hicieron muy pequeños, de tener 35 ahorita tenemos 22 o 21, muchos papás desertaron y se fueron a otras escuelas, entonces no sabemos qué va a pasar con la matrícula”.
Aunque los alumnos están resguardados bajo techo, los maestros apuntan que las instalaciones de la parroquia no son adecuadas para continuar con las clases, ya que los alumnos se distraen fácilmente escuchando al resto de los grupos e incluso, padecen aún más las altas temperaturas, lo que afecta su rendimiento académico.
También afirman que, en algún momento, las clases tendrán que detenerse, ya que la comunidad religiosa también necesita de las instalaciones para continuar con las celebraciones programadas, como las fiestas en honor a Jesús Nazareno, en el marco de la Feria de los Chicahuales.
La incertidumbre
Los educadores se dicen preocupados por el futuro de los estudiantes, ya que, de ser reubicados, podrían saturar otros planteles del municipio. Por el momento, los maestros ya recibieron indicaciones para su reubicación en otros planteles para el próximo ciclo escolar.
“Estábamos esperando que nos dijeran si nuestra escuela iba a ser reubicada en otro lugar, si nos iban a construir una escuela para tomar una decisión, si seguir en nuestra escuela o buscar otro centro de trabajo. El martes nos mandan llamar del IEA, y nos van a ubicar en otros centros de trabajo y nuestra pregunta es ¿por qué nos van a ubicar en otro centro de trabajo?”.
Este jueves, el Municipio de Jesús María informó que, en conjunto con la directora del IEA, Lorena Martínez Rodríguez, se recorrieron varias escuelas para escuchar las necesidades de cada una, especialmente las de la primaria Amado Nervo.
En esta reunión, se habría acordado una coordinación para resolver la reubicación del plantel.
En este encuentro, también participaron algunos miembros del gabinete municipal, así como directivos de la primaria Amado Nervo y otros funcionarios estatales.
Por el momento, no se obtuvo más información por parte del Instituto de Educación de Aguascalientes.
Se estima que el plantel cuenta con más de 300 estudiantes.