El pasado 1° de octubre la administración de Jorge Zermeño Infante, presidente municipal de Torreón, extendió una licencia para la reapertura del casino Majestic, sin importar que la Constitución estatal lo prohíbe.
La carta magna de Coahuila, en su artículo 158-U, deja claro la prohibición de suelo para casinos, centros de apuestas, salas de sorteos, casas de juegos y similares, así como la prohibición de la extensión de licencias y permisos para estos lugares.
De acuerdo con el siglo de Torreón, la licencia fue emitida a nombre de Atracciones y Emociones Vallarta S.A. de C.V, y se refiere al giro comercial para la “operación de video Juegos que funcionan con fichas o monedas”. Además, tienen como actividad “servicios deportes y juegos electrónicos”.
El gobernador del estado, Miguel Ángel Riquelme, aseguró que dicha licencia no significa que el casino podrá operar y calificó a estos establecimientos como “fuentes de financiamiento al crimen organizado”.
En el 2012 personal de Protección Civil, en coordinación con la policía local y el ejército mexicano, clausuró varios casinos y casas de apuestas debido a la gran ola de violencia por la que cruzaba el estado.