Algunas de sus funciones son ayudar al cuerpo a la digestión, producir vitaminas, desarrollar el sistema inmunológico y combatir microorganismos patógenos.
Queda claro que tener una microbiota mal desarrollada o con pocos microorganismos puede afectarnos de varias maneras, y qué tan bien poblado esté nuestro tracto gastrointestinal depende de nosotros.
Estos son algunos factores que afectan nuestro desarrollo de microbiota:
• Nacer por cesárea
• Tomar leche de fórmula
• Tomar antibióticos
• Alimentación rica en comida chatarra
• Contaminación
• Detergentes de hogar o uso personal
• Cigarro
• Alcohol