Tenemos la tendencia de pensar en los seres humanos como seres bastante especiales, superiores en capacidad sobre todos los demás animales. La agricultura, por ejemplo. ¿Qué otra criatura puede hacer eso?
Bueno, en realidad las hormigas, y nos vencieron en eso hace millones de años. Un estudio publicado el 20 de julio en la revista Nature Communications sugiere que las hormigas cultivadoras de hongo desarrollaron su propia forma de agricultura hace unos 55 millones o 60 millones de años, un desarrollo mucho más antiguo de lo que se pensaba.
Estas hormigas, de los cuales hay más de 200 especies, mastican pequeños trozos de hojas y los llevan de vuelta a su colonia. Allí, en búnkeres subterráneos, un tipo específico de hongo descompone las hojas y produce “cuerpos fructíferos” llenos de proteína que los insectos comen.
En el documento, los científicos del Instituto Smithsoniano, la Universidad de Copenhague y de otros lugares analizaron los genomas de siete tipos de hormigas cultivadoras de hongo, que viven en América Central y del Sur. Su análisis encontró que los genes de las hormigas y del hongo empezó a cambiar poco después de la desaparición de los dinosaurios.
Así como las hormigas y los hongos comenzaron a confiar entre sí, cada uno de ellos perdió habilidades que les permitían sobrevivir aparte. Por ejemplo, las hormigas perdieron la capacidad de digerir los aminoácidos que no se encuentran en los alimentos producidos por los hongos; mientras que el hongo ya no puede descomponer otra cosa que no sea el material de las hojas.
Cuando las hormigas se dedicaron a la agricultura, esto “dio lugar a una cascada evolutiva de cambios, no igualada por ningún otro linaje de animales estudiados hasta ahora”, dijo Jacobus Boomsma, investigador asociado en el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales y profesor de biología en la Universidad de Copenhague, en una declaración.
Lo mismo no puede decirse de los seres humanos. Generalmente se considera que somos genéticamente los mismos (o al menos muy, muy similares) que nuestros antepasados que desarrollaron la agricultura hace unos 10,000 años.
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Publicado en colaboración con Newsweek / Published in colaboration with Newsweek