La Procuraduría Federal de la Protección al Ambiente (Profepa) anunció este miércoles el cierre de cuatro plantas desaladoras en San Quintín, Baja California por no tener permisos para operación.
Tras realizar inspecciones a Horticultura Las Parritas S.A de C.V, Seminis Vegetable Seeds Mexicana S. de RL de CV, Rancho Pochtlán S.A de C.V y Rancho San Isidro S.A de C.V, Profepa identificó que estas cuatro plantas contaban con obras hidráulicas inherentes a la instalación y el desecho indebido de agua de rechazo.
De acuerdo al comunicado de prensa, al notar las irregularidades, el personal de Profepa pidió los permisos de la Semarnat en materia de impacto ambiental.
Estas plantas desalinizadoras contaban solo con los títulos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), sin embargo no acreditan la evaluación del posible impacto y afectación del medio biótico y abiótico, además de los efectos sobre el ecosistema y hábitat de especies de flora y fauna.
Al carecer de la autorización necesaria, conforme al artículo 170 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, se ordenó la clausura temporal de las cuatro plantas.