Actualmente, el Servicio Médico Forense (SEMEFO) de Aguascalientes resguarda alrededor de 40 cadáveres. La mayoría de ellos aún no han podido ser identificados, reconoció el fiscal general, Jesús Figueroa Ortega.
El funcionario explicó que, de los 40 cuerpos, solamente cinco pudieron ser identificados por los especialistas. Algunos de los restos ya se entregaron a los familiares de la víctima, mientras que otros siguen bajo el resguardo de la Fiscalía, debido a que nadie los ha reclamado.
“El día de ayer me informaban que recientemente, en menos de un mes se han entregado cinco cuerpos que teníamos nosotros ahí a familias, porque hemos estado llevando a cabo el proceso de cruce de ADN con familias de personas desaparecidas, pero tenemos cuerpos identificados que nadie va por ellos”.
Expuso que la mayoría de estos cuerpos corresponden a hombres de entre 25 y 35 años de edad. También recalcó que las autoridades han encontrado restos humanos en un avanzado estado de descomposición, lo que complica la labor de identificación por parte de los forenses.
Figueroa Ortega descartó que Aguascalientes tenga casos de personas calcinadas en espacios como ladrilleras o predios abandonados, como sí ocurre en otros estados del país. También recordó que se han localizado algunas fosas clandestinas en la región.
Con ello, reconoció que la violencia ha escalado a nivel nacional, por lo que la FGE decidió ampliar su capacidad de respuesta ante el recibimiento de cuerpos, con el apoyo del Municipio de Aguascalientes.
“La dinámica de la violencia en el país se ha ido incrementando, nosotros hace un año y medio, cerca de dos años, ampliamos nuestro espacio para ello, pero también hemos estado llevando a cabo un convenio con el municipio capital para, pasado determinado tiempo, mandar cuerpos de manera individual a panteones”.
Agregó que la Fiscalía envía los cuerpos más antiguos a los panteones de la capital, a fin de que tengan sepultura. Por su parte, las autoridades resguardan las muestras de ADN de las víctimas, en caso de que sus restos sean buscados o reclamados por sus familiares.