El secretario de Estados Unidos de Defensa, Lloyd Austin, aprobó más de 100 recomendaciones para frenar los suicidios entre militares, incluyendo el mejoramiento de la seguridad de las armas en las bases del ejército, informó el Pentágono este jueves 28 de septiembre.
Las directrices son el resultado de la evaluación de 11 instalaciones militares por parte del Comité Independiente de Revisión para la Prevención y Respuesta al Suicidio (SPRIRC, por sus siglas en inglés), que realizó más de 2,700 entrevistas a personal militar y civil.
Las recomendaciones se dividen en cinco categorías: aumentar la calidad de vida de los miembros del servicio, mejorar la prestación de servicios de salud mental, abordar el estigma en torno a la búsqueda de ayuda, revisar la formación en prevención del suicidio y mejorar la seguridad de las armas de fuego.
El Pentágono afirma que más de 500 militares y 200 de sus allegados se quitaron la vida —la mayoría utilizando armas— durante 2021, el año más reciente del que se disponen datos.
“Todos nosotros en el Departamento de Defensa tenemos que hacer más para prevenir estas tragedias”, escribió Austin en un memorando sobre las recomendaciones, fechado el 26 de septiembre, pero publicado este jueves.
PARA LOS SUICIDIOS, EL 70 POR CIENTO DE LOS MILITARES UTILIZA PRINCIPALMENTE ARMAS
La nota señala que “aproximadamente el 70 por ciento de los miembros del servicio que mueren por suicidio utilizan armas como principal mecanismo de lesión” y que “se ha demostrado que las prácticas de almacenamiento seguro de las armas salvan vidas”.
Para hacer frente a esto, el ejército tomará medidas como ofrecer incentivos a las tropas para la compra de espacios de almacenamiento seguro del armamento.
Sin embargo, no se aprobaron otras recomendaciones relacionadas, como los periodos de espera para la compra de armas y munición en las propiedades del Departamento de Defensa, así como el aumento de la edad mínima a 25 años.
En relación con la restricción de edad, Elizabeth Foster, directora ejecutiva de la Oficina de Resiliencia de las Fuerzas, explicó a los periodistas que las cuestiones jurídicas desempeñaron un papel importante.
“En última instancia, hemos determinado que existen importantes obstáculos jurídicos para aplicar esa recomendación en este momento”, declaró.
La regulación de las armas de fuego trae consigo tema polémico en Estados Unidos, donde los políticos conservadores se oponen a la mayoría de las restricciones destinadas a frenar la frecuente violencia armadas. N