Personas ajenas al Instituto de Vivienda de la Ciudad de México (INVI) buscan aprovecharse de la necesidad de capitalinos de encontrar una casa y se han hecho pasar por trabajadores de la dependencia, para defraudar a habitantes que confían en ellos y les depositan dinero con la promesa de asegurar un espacio en alguno de los inmuebles que están en construcción.
“Hay defraudadores que le sacan dinero (a las personas) e inclusive falsifican documentos oficiales (…) Hemos detectado que falsifican credenciales de servidores públicos y firmas de servidores públicos”, informó Anselmo Peña Collazo, director del Invi.
A través de redes sociales y algunas páginas especializadas en la compraventa de inmuebles, detalló, los defraudadores publicitan las viviendas mostrando fotografías reales de los edificios terminados o que están en construcción por parte del INVI.
En entrevista, el funcionario dijo que en esta administración el instituto ha promovido 192 procedimientos legales, por denuncias por intento de fraude o despojo y por juicios reivindicativos, además de que con apoyo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) ha reforzado la vigilancia en los inmuebles para evitar que grupos ajenos a los beneficiarios los ocupen ilegalmente.
Incluso, señaló que, aunque cada vez los casos con menos, en su oficina ha recibido a personas que le muestran copia de credenciales de supuestos servidores públicos a quienes les han depositado 30 mil o 40 mil pesos porque, si no lo hacían, no se les incluiría como beneficiarios en los proyectos del Invi.
“Cuando hay elementos de que sí se depositó en alguna cuenta y nos muestran comprobantes, nosotros los integramos a las denuncias que hacemos en la fiscalía para su investigación y dar con los que hayan hecho esta actividad”, detalló el funcionario.
“El Instituto de Vivienda no hace viviendas para venta, el Instituto de Vivienda da créditos a familias”, recalcó.
Una vez que los beneficiarios concluyen con el pago del crédito que les otorga el Invi —como ocurre con cualquier hipoteca—, pueden poner a la venta el inmueble; antes no, por lo que quienes ofrezcan en venta viviendas en proceso de construcción o terminadas buscan defraudar a los interesados.
Autoridades descartan mal uso de Norma 26
Respecto del caso del edificio ubicado en Febo 17, en la colonia Crédito Constructor en la alcaldía Benito Juárez, donde una empresa privada obtuvo permisos para construir un inmueble con pisos excedentes haciéndolo pasar por un proyecto del Invi —y que Animal Político dio a conocer en esta nota—, el funcionario aseguró que durante su encargo no se han presentado casos similares y que esta situación se autorizó en la pasada administración.
“Somos muy cuidadosos y verificamos que sean organizaciones que están inscritas en el padrón de organizaciones y, cuando son grupos independientes, pues que efectivamente sean grupos que quieren construir viviendas sociales… En otros años probablemente no verificaban que fueran organizaciones conocidas, que ya tuvieran proyectos realizados y que hubieran llegado a buen término con la gente que metían a sus padrones de que sí les cumplían y que no se pasaban de listos”, dijo. N