En todo el mundo, 420,000 personas pierden la vida, anualmente, después de comer alimentos contaminados. Y 125,000 muertes son de niños menores de cinco años, informó este miércoles 7 de junio la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a propósito del Día Mundial de la Seguridad Alimentaria. Bajo el lema “Las normas alimentarias salvan vidas”, la fecha destaca el papel de las prácticas y estándares de seguridad que disminuyen los riesgos de contaminación alimentaria.
600,000 CASOS DE ENFERMEDADES POR ALIMENTOS CONTAMINADOS
Creada en 2018, la fecha quiere aumentar la información sobre los peligros de la intoxicación y la contaminación por alimentos. Según Naciones Unidas, cada año se producen al menos 600,000 casos de enfermedades causadas por alimentos manejados sin el mínimo de seguridad. Las personas más necesitadas y vulnerables suelen ser las más afectadas, incluidas las mujeres y los niños.
El acceso a alimentos inocuos y nutritivos en cantidad suficiente es fundamental para mantener la vida y fomentar la buena salud. Las enfermedades transmitidas por los alimentos suelen ser de naturaleza infecciosa o tóxica. Con frecuencia son invisibles a simple vista y están causadas por bacterias, virus, parásitos o sustancias químicas que entran en el organismo a través de alimentos o agua contaminados.
La inocuidad de los alimentos juega un papel fundamental a la hora de garantizar la seguridad de los alimentos en cada etapa de la cadena alimentaria: desde la producción hasta la cosecha, en el procesamiento, el almacenamiento, la distribución; hasta el final de la cadena, en la preparación y el consumo.
LOS ALIMENTOS CONTAMINADOS, UNA AMENAZA PARA LA SALUD
Los alimentos no inocuos son una amenaza para la salud humana y las economías. Afectan desproporcionadamente a las personas vulnerables y marginadas, especialmente a las mujeres y los niños, y a las poblaciones sujetas a los conflictos y la migración.
Asimismo, los niños menores de 5 años representan un 40 por ciento de la carga de morbilidad por enfermedades de transmisión alimentaria, con 125,000 muertes al año. En tanto, la Organización Panamericana de la Salud (OPS), indica que del total de personas que contraen enfermedades por alimentos contaminados en la región de las Américas, 31 millones son niños menores de 5 años, de ellos, más de 2000 fallecen al año.
La ingesta de alimentos contaminados por bacterias, parásitos, contaminantes químicos y biotoxinas puede desencadenar un amplio grupo de enfermedades que van desde la diarrea hasta el cáncer. N