Los mercados financieros seguirán con más atención que la mayoría los resultados de las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024, preparados para reaccionar tan pronto como empiece a perfilarse un ganador y, con ello, también el rumbo futuro de la política económica estadounidense.
Las encuestas públicas sugieren que la carrera entre la candidata demócrata a la vicepresidenta Kamala Harris y su rival republicano, el ex presidente Donald Trump, está muy igualada, lo que da a los inversores poco en qué basarse antes de las elecciones.
Si las cosas están tan ajustadas como parecen, podrían pasar días o incluso semanas antes de que finalmente se confirme un ganador, con la posibilidad de recuentos y litigios en condados y estados en disputa que amenazan con prolongar la elección, un escenario doloroso para los inversores.
En medio de la incertidumbre, Newsweek preguntó a los estrategas del mercado cuáles eran, en su opinión, los mayores riesgos de una victoria de Trump y de Harris en las elecciones de 2024. Esto es lo que nos dijeron:
Richard Bernstein, director ejecutivo y director de inversiones de Richard Bernstein Advisors LLC
Si Trump aplica aranceles, el mayor riesgo es la inflación. Los aranceles podrían ser eficaces si Estados Unidos tuviera un exceso de capacidad productiva, pero el problema es que nuestro déficit comercial refleja que no tenemos suficiente capacidad productiva para satisfacer la demanda.
Así, sin productos estadounidenses que sustituyan a los bienes importados, los consumidores no tienen otra opción que comprar el bien importado al precio más alto, sujeto a aranceles.
Para Harris: exceso de regulación. Estados Unidos necesita urgentemente fomentar la reconstrucción de su base industrial.
Sin embargo, se trata a menudo de industrias “sucias”, como la siderúrgica, la manufacturera, la energética y otras similares. Una regulación excesiva o mal concebida podría obstaculizar esa transformación económica tan necesaria.
Eric Wallerstein, estratega jefe de mercados de Yardeni Research
Si Trump gana en una ola roja —lo que consideramos como una mayoría cómoda en el Senado y la retención de la Cámara de Representantes— existe el riesgo de que los recortes de impuestos no financiados aumenten aún más el déficit federal.
Es poco probable que los aranceles financien completamente la serie de recortes impositivos propuestos, y aún tenemos que estar convencidos de que los gastos se reducirán significativamente lo suficiente como para evitar que el déficit se amplíe.