Ecuador fue uno de los primeros países en detectar casos de influenza aviar en 2022. Según el Ministerio de Agricultura y Ganadería, Cotopaxi fue el foco del primer brote de la enfermedad, obligando al sacrificio de unas 180,000 aves de las fincas afectadas.
A raíz de ello, Ecuador declaró el 30 de noviembre la emergencia zoosanitaria y activó un plan para proteger a las aves de Galápagos, un frágil ecosistema con especies únicas en el mundo.
En Ecuador, el sector avícola incluye 263 millones de pollos y 16 millones de aves ponedoras. Esto genera unos 1,800 millones de dólares anuales y unos 300,000 empleos. Sin embargo, este país sudamericano también registró el primer caso de influenza H5N1 en una niña de nueve años, en la provincia de Bolívar. De acuerdo con el Ministerio de Salud, la infección se dio por el contacto directo con aves que portaban el virus.
En enero de 2023, Honduras decreto una emergencia sanitaria por 90 días, luego de detectar esta enfermedad en pelícanos localizados en la costa del Caribe, consignó un decreto en la Gaceta Oficial. El periodo de emergencia se determinó con el objetivo de prevenir, controlar y eliminar la influenza, altamente patógena, en aves domésticas y silvestres.
Un mes después, en febrero, el brote de H5N1 causó la muerte de 585 lobos marinos y 55,000 aves, por lo que las autoridades anunciaron un protocolo de vigilancia biológica en medio de la alerta sanitaria vigente.
El Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) informó que “personal especialista y guardaparque registró la muerte de las aves en ocho áreas naturales protegidas de la costa” a causa de la influenza aviar.
LA INFLUENZA AVIAR NO TIENE CURA NI TRATAMIENTO
Las especies de aves más afectadas son piqueros, pelícanos y guanayes, seguido de zarcillos, gaviotas dominicanas, gaviotas peruanas y gaviotas grises, indicó el Sernanp en un boletín de prensa divulgado esta semana.
A ello se añaden resultados positivos por H5N1 en “especies de lobos marinos, pingüino de Humboldt, piquero y ostrero”, determinados tras análisis de muestras de fauna detectadas, procesadas en laboratorios de Patología veterinaria en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, en Lima.
A esta presencia de influenza aviar también se sumó Cuba, cuando en febrero declaró la presencia de la enfermedad en aves de un zoológico de La Habana. Por su parte, Guatemala alertó haber detectado casos en la aldea El Quetzalito en el municipio de Puerto Barrios, asentado en la costa Caribe de Guatemala y fronterizo con Honduras.
De acuerdo con especialistas, la influenza aviar es una enfermedad que no tiene cura ni tratamiento, y causa alta mortalidad en aves silvestres y domésticas como patos, gallinas, pollos, pavos, por mencionar algunos.
MÁS DE 200,000 AVES DE CORRAL MUERTAS EN ARGENTINA
Uno de los casos más recientes de muertes por influenza aviar ocurrió en Argentina. Unas 260,000 aves de corral murieron en los últimos días, en el marco de un brote, informó este jueves 9 de marzo una fuente del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).
Los animales, en su mayoría pollos, murieron como consecuencia de la propia enfermedad o sacrificados por los propietarios de los corrales. Del total, 220,000 muertes ocurrieron en un establecimiento de la provincia de Río Negro, 10,000 en uno de Neuquén y 30,000 entre dos sitios productivos de la ciudad de Mar del Plata, localizada en la provincia de Buenos Aires y a 400 kilómetros al sur de la capital argentina.
Según el último reporte oficial del Senasa este jueves, de las 200 notificaciones recibidas por casos sospechosos, se han confirmado 40 como positivas. Es la primera vez desde la aparición hace 20 años de la influenza aviar en el mundo que la enfermedad llega a Argentina y se estima que fue a través de las aves migratorias, indicó la fuente.
Tras detectarse el primer caso en un establecimiento productivo el 1 de marzo pasado, Argentina suspendió la exportación de productos avícolas debido a que perdió temporalmente su estatus de libre de la enfermedad. Las ventas de productos avícolas argentinos al exterior representan unos 330 millones de dólares al año y tienen a China como principal destino. N
(Con información de AFP)