Roberto Borge Angulo, exgobernador de Quintana Roo, fue detenido en Panamá justo antes de que abordara un vuelo con destino a París, informó durante la madrugada la Procuraduría General de México.
La localización y detención del exmandatario se realizó como resultado del trabajo conjunto entre la Subprocuraduría Jurídica y de Asuntos Internacionales y de la Agencia de Investigación Criminal de México con la Procuraduría General y la Interpol Panamá.
Borge Angulo, emanado de las filas del Revolucionario Institucional (PRI), partido del que fue expulsado, tiene una orden de aprehensión en su contra por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
El gobierno de México solicitó este lunes la extradición de Roberto Borge.”Ya se inició el proceso de extradición a solicitud de México ante el gobierno de Panamá. Esperemos que se ejecute este procedimiento a los sesenta días y continuar con su entrega a las autoridades mexicanas”, dijo este lunes Alberto Elías, subprocurador jurídico y de asuntos internacionales de la fiscalía mexicana, en entrevista con la cadena local Televisa.
Elías dijo que Borge, de 37 años de edad, está acusado de lavado de dinero y detalló que durante su gestión varios inmuebles propiedad del estado que gobernaba se vendieron al 1 por ciento de su valor real.
Con su captura suman seis los exgobernadores mexicanos detenidos, cinco del PRI y uno del Partido Acción Nacional (PAN).
Ya otro gobernador de Quintana Roo, Mario Villanueva (1993-1999), fue capturado por nexos con el narcotráfico en 2001, y en 2010 fue extraditado a Estados Unidos.
En enero volvió al país tras cumplir una pena, pero sigue en una prisión mexicana cumpliendo una condena de más de 20 años.
En abril, Tomás Yarrington, exgobernador de Tamaulipas, fue acusado de narcotráfico por Estados Unidos y capturado en Italia, mientras que el exgobernador de Veracruz (este), Javier Duarte, fue detenido en Guatemala acusado de delincuencia organizada y operaciones con recursos ilícitos.
Los continuos escándalos de corrupción que han envuelto a exgobernadores del PRI le costaron al partido una dura derrota en elecciones locales en 2016, aunque en los comicios del vital Estado de México realizados el domingo pasado, su candidato, Alfredo del Mazo, lleva una ventaja.