Israel anunció este domingo la suspensión del ingreso de mercancías y suministros en la Franja de Gaza y amenazó a Hamás con otras consecuencias si persiste en rechazar la propuesta estadounidense de prolongar la tregua.
El movimiento islamista palestino denunció inmediatamente la decisión del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, como “un chantaje barato, un crimen de guerra y un golpe descarado contra el acuerdo (de alto al fuego)”, declaró el grupo en un comunicado.
EEUU presentó un plan que consiste en extender el alto el fuego durante el periodo del Ramadán y Pascua judía que recibió el apoyo de Israel, pero Hamás lo rechazó.
La propuesta para extender la tregua, hecha por el enviado estadounidense Steve Witkoff, abarcaría la fiesta musulmana del Ramadán, que concluye a finales de marzo, y la Pascua judía, que llega a mediados de abril, indicó en un comunicado la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
La primera fase de tregua entró en vigor el 19 de enero después de más de 15 meses de un conflicto desencadenado por el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023 contra el sur de Israel, el más mortífero en la historia del país.
Durante estas semanas, el grupo islamista liberó a 25 rehenes y devolvió los cadáveres de otros ocho a Israel, a cambio de la excarcelación de cientos de prisioneros palestinos.
Esta siguiente etapa del acuerdo debía conducir al fin permanente del conflicto en Gaza.
Hamás rechazó esta propuesta y señaló que “la única manera de lograr la estabilidad en la región y el regreso de los prisioneros es completar la aplicación del acuerdo (…) empezando por la aplicación de la segunda fase”, según dijo en una declaración el dirigente Mahmoud Mardawi.
Sostuvo que atrasar la aplicación de la segunda fase equivale a que Israel “reniegue de los acuerdos que ha firmado”.
Hamás denuncia crimen de guerra
Frente a este rechazo de Hamás, “el primer ministro (Benjamin) Netanyahu decidió que, desde esta mañana, se suspende cualquier entrada de mercancías y suministros en la Franja de Gaza”, indicó un comunicado de su oficina.
“Israel no aceptará un alto al fuego sin liberación de nuestros rehenes” y “si Hamás persiste en su rechazo, habrá otras consecuencias”, agregó el comunicado.
“Ningún camión entró en Gaza esta mañana y ninguno lo hará” hasta nuevo aviso, escribió Omer Dostri, portavoz de Netanyahu, en X.
Hamás pidió a “los mediadores y a la comunidad internacional (que) presionen” a Israel para que “ponga fin a sus medidas punitivas e inmorales contra más de dos millones de personas en la Franja de Gaza”.
La decisión de Netanyahu recibió el apoyo del ministro israelí de Finanzas, Bezalel Smotrich, jefe de un partido de extrema derecha que exige la victoria total en la guerra contra los palestinos.
“La decisión (…) de bloquear totalmente la entrada de ayuda humanitaria en Gaza hasta la destrucción de Hamás o su rendición total y la liberación de todos nuestros rehenes es un paso importante en la dirección correcta”, escribió Smotrich en Telegram.
Ahora hay que “abrir (las) puertas (del infierno) tan rápida y violentamente como sea posible contra el despiadado enemigo, hasta la victoria total”, agregó.