El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su sucesor entrante, Donald Trump, emitieron el miércoles mensajes navideños marcadamente contrastantes, y este último reafirmó sus recientes comentarios sobre la toma del Canal de Panamá, la compra de Groenlandia y la anexión de Canadá.
Mientras Biden publicó un breve y tradicional mensaje de temporada sobre “bondad y compasión”, Trump lanzó una rápida andanada de tres docenas de publicaciones a lo largo del día, con sus mensajes navideños dirigiéndose directamente a los “lunáticos de izquierda radical” y al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, “cuyos impuestos ciudadanos son demasiado altos”.
“Feliz Navidad a los lunáticos de la izquierda radical, que constantemente intentan obstruir nuestro sistema judicial y nuestras elecciones”, dijo el presidente electo en un mensaje, usando su estilo característicamente errático de capitalización.
Pasó el día de Navidad criticando en su sitio web Truth Social su percepción de persecución política, un contraste con los deseos navideños de Biden “a todos los estadounidenses”.
La remontada electoral del republicano en noviembre se produjo tras una mayor polarización y división política en todo el país, algo que Trump aprovechó en sus publicaciones.
Trump publicó una foto en la que aparece como “patriota del año” y otra sonriendo burlonamente al expresidente demócrata Barack Obama.
Otros incluyeron artículos elogiando sus nombramientos para el gabinete, su deseo de comprar Groenlandia y sus quejas sobre las tarifas que pagan los barcos estadounidenses que pasan por el Canal de Panamá.
El presidente electo volvió a llamar a Trudeau el “gobernador” de Canadá, diciendo que si el país se convirtiera en “nuestro estado número 51, sus impuestos se reducirían en más del 60%” y “sus empresas duplicarían inmediatamente su tamaño”.
Trump también redobló sus amenazas de exigir el control estadounidense del Canal de Panamá, quejándose de que China tenía una influencia “ilegal” sobre la vía fluvial y que Washington “pone miles de millones de dólares en dinero para ‘reparaciones’, pero no tiene absolutamente nada que decir sobre ‘nada'”.
Minutos después, anunció su elección del político floridano Kevin Marino Cabrera como embajador en Panamá, “un país que nos está estafando en el Canal de Panamá, mucho más allá de sus sueños más locos”.
