Mantener un vínculo especial con tu perro puede reducir la depresión y la ansiedad, así como mantener una mejor salud mental, indica un nuevo estudio realizado por científicos de la Universidad de Harvard.
Los investigadores del Estudio de Salud de las Enfermeras de Harvard que exploran hallazgos contradictorios sobre si la propiedad de mascotas es buena para la salud mental han descubierto que tener –y amar– un perro (no gatos) está asociado con síntomas más bajos de depresión y ansiedad.
Eva Schernhammer, investigadora del estudio publicado recientemente en la revista JAMA Network Open, dijo que el trabajo es un paso inicial “para descubrir las conexiones entre nosotros mismos, nuestra salud física y mental y las mascotas que tenemos”.
Explicó: “Utilizamos varias medidas diferentes para la depresión y la ansiedad y, en general, descubrimos que hay una asociación inversa entre el apego de las mascotas y los resultados negativos para la salud mental. Eso significa que cuanto más apegado estés a tu perro, menor será el riesgo de depresión y ansiedad”.
El efecto fue particularmente fuerte entre las mujeres que tenían antecedentes de abuso sexual o físico en la infancia, que constituían la mayoría de la población de estudio.
“Esos hallazgos los impulsaron en su mayoría los perros, porque la mayoría de las mascotas que se poseían en el estudio eran perros: eran alrededor de dos tercios de perros y un tercio de gatos. La asociación fue similar a lo que encontramos al restringir el análisis solo a los perros, pero no tan fuerte”.
EL APEGO CON TU PERRO DISMINUYE LA DEPRESIÓN MÁS QUE EL APEGO CON TU GATO
Con los gatos, no parece haber una asociación entre el apego de las mascotas y los resultados de salud mental. Sin embargo, “hubo un número menor de encuestados, por lo que no podemos descartar que no veamos nada porque había muy pocos gatos en la encuesta. Creo que todos nos sorprendió un poco que haya una diferencia tan grande entre perros y gatos. Será interesante explorar esto más a fondo”.
Esta investigación es parte de un estudio más grande para examinar la interacción entre humanos y animales, específicamente con las mascotas. “Sentimos que esto no está estudiado, y hubo una gran oportunidad de explorarlo en la cohorte del Estudio de Salud de las Enfermeras. También es algo que a la gente le gusta compartir: resulta que las enfermeras del estudio estaban más que dispuestas a proporcionar detalles interesantes sobre sus mascotas”.
Se han realizado muchos estudios sobre los efectos de la propiedad de mascotas, pero la premisa de este estudio es que puede importar más cuánto se está apegado a la mascota que si simplemente se tiene una mascota. Muchas personas tienen mascotas, pero no todos los propietarios están apegados a su mascota.
A mucha gente no le gusta tener que pasear a sus perros por la mañana porque el perro es la mascota querida de su hijo, por ejemplo. Así que el objetivo era determinar si el apego es la variable más importante que vincula a las mascotas con los resultados de salud en los seres humanos, y luego estudiar los mecanismos.
LAS MASCOTAS Y UNA MEJOR SALUD MENTAL
Hemos completado, hasta cierto punto, la primera parte de este proyecto y ahora estamos empezando a buscar mecanismos que podrían explicar por qué un mayor apego a las mascotas podría estar relacionado con mejores resultados de salud mental en estas cohortes. La hipótesis principal es que esto podría ser mediado por el microbioma y la metabolómica.
Curiosamente, en nuestro análisis metabolómico preliminar, vemos patrones bastante diferentes entre gatos y perros. Será interesante entender si algunos de estos hipotéticos mecanismos de microbioma realmente difieren entre gatos y perros y podrían explicar lo que vemos en este primer documento.
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