La inmigración a Estados Unidos está siendo impulsada en parte por la violencia armada, que a su vez es alimentada por armas de fuego compradas en Estados Unidos y transportadas ilegalmente a México y otros países por redes del crimen organizado.
Más de 200.000 armas de fuego encontradas en El Salvador, Guatemala, Honduras y México entre 2015 y 2022 fueron vinculadas a Estados Unidos, según muestran datos recientes de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF).
Los migrantes de esos cuatro países constituyen la mayor parte de los cruces fronterizos hacia Estados Unidos cada año.
“Las organizaciones criminales que trafican drogas a Estados Unidos también controlan el movimiento de migrantes y hacen imposible que muchas familias permanezcan en sus comunidades. [Ellos] obtienen sus armas de los mercados minoristas estadounidenses”, dijo a Newsweek John Lindsay-Poland, de la organización Stop US Arms to Mexico .
El mapa a continuación utiliza datos federales publicados bajo una solicitud de la Ley de Libertad de Información (FOIA) que muestra los estados y condados donde se rastrearon esas armas de fuego.
Texas encabezó la lista, con 22.506 armas de fuego vinculadas desde esos cuatro países, seguido por otros estados fronterizos, Arizona (9.451) y California (7.796).
Se encontraron armas vinculadas a los 50 estados de EE. UU. en México, El Salvador, Guatemala y Honduras, y algunas llegaron a lugares tan lejanos como Maine y Hawai.
El mapa que aparece a continuación muestra los condados de EE. UU. con la mayor cantidad de armas de fuego vinculadas a ellos. El condado de Maricopa, en Arizona, fue el que tuvo la mayor cantidad, con 4983, mientras que el condado de Harris, en Texas, registró 3787.
El nexo entre la inmigración y la violencia armada
Si bien algunas armas fueron traficadas a través de redes criminales complejas, muchas otras fueron simplemente compradas en Estados Unidos, generalmente por intermediarios, y llevadas de regreso al otro lado de la frontera.
México mantiene leyes estrictas sobre quién puede comprar armas de fuego, y todas las armas deben estar registradas ante el gobierno federal. Es una parte del debate sobre la inmigración que con demasiada frecuencia pasa desapercibida, dijo Lindsay-Poland.
“Para los republicanos , cualquier conversación sobre el impacto negativo de las armas es una línea roja y no pueden llegar hasta allí. Por eso, incluso las propuestas más modestas de transparencia o de control del comercio legal o de impedir que las armas más militarizadas lleguen a los cárteles están fuera del alcance de los republicanos”, afirmó.
“Entre los demócratas , yo diría que hay una creciente conciencia de los vínculos entre las armas y la migración forzada, pero la mayoría de los demócratas todavía hablan de esos temas por separado, como si no estuvieran relacionados”.
Los cárteles que trafican drogas como el fentanilo a Estados Unidos se han convertido en un foco importante para los republicanos, pero los expertos dicen que el tráfico de armas que va en la dirección opuesta también debe abordarse, y que ambos están intrínsecamente vinculados.
Jean Guerrero, del Laboratorio Latina Futures 2050 de la UCLA, escribió en un ensayo reciente que Kamala Harris debería plantear la inmigración como un tema de control de armas como parte de su discurso ante los votantes para 2024. Hizo referencia al primer anuncio de campaña de Harris, centrado en la frontera, que resaltaba su experiencia como fiscal persiguiendo a los cárteles.
Los funcionarios estadounidenses dicen que están apuntando al comercio
A principios de este año, el gobierno mexicano anunció que demandaría a los fabricantes de armas estadounidenses por la cantidad de armas de fuego que ingresaban a un país que solo tenía una tienda de armas legal.
Si bien los funcionarios de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) han confiscado 3.634 armas y municiones que se dirigían a Estados Unidos desde octubre de 2023 hasta junio, los datos sobre las incautaciones en sentido inverso son difíciles de obtener.
Un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional señaló declaraciones hechas en septiembre de 2023 de que ATF había confiscado más armas de fuego que iban a salir de EE. UU. en los 12 meses anteriores en comparación con el año anterior.
“Las investigaciones para desmantelar redes criminales se han beneficiado enormemente de una mayor colaboración entre agencias, tanto dentro del DHS como con nuestros socios federales”, dijo la agencia en ese momento.
“Mantener las armas y municiones fuera del alcance de los criminales es vital para mantener seguras a las comunidades en ambos lados de la frontera. Nuestras investigaciones llevan a los criminales ante la justicia aquí en los Estados Unidos y brindan apoyo a los socios de las fuerzas del orden en México mientras trabajan para desmantelar redes peligrosas de los cárteles”.
Pero las armas no sólo llegan a México. Guatemala recibió una gran cantidad de armas, incluidas pistolas, que se originaron en Estados Unidos tras los cambios en las leyes de exportación bajo la administración Trump.
Newsweek se comunicó con ATF para obtener más comentarios sobre el tema, pero aún no recibió respuesta.
¿Podría ayudar la prohibición de armas de asalto?
Si bien Lindsay-Poland dijo que no había una solución rápida para un problema tan complejo como el tráfico internacional de armas, una prohibición de las armas de asalto (una política a menudo promocionada por los demócratas, incluida Harris) podría ayudar a detener el flujo de armas de fuego fuera del país.
“No será inmediato porque ya hay muchas armas de asalto de Estados Unidos en México, pero es la herramienta más común utilizada por las organizaciones criminales que están haciendo que la vida en México sea simplemente imposible de permanecer”, dijo.
La medida ha sido respaldada por Everytown, una organización sin fines de lucro de control de armas con muchos recursos económicos, que destacó que el Departamento de Justicia había acusado a más de 1.300 personas por tráfico de armas de fuego en los últimos cinco años.
Centrarse sólo en la frontera suroeste no iba a resolver el problema, a pesar de que ambos partidos se centraron en ello como un punto clave de discusión en las elecciones, dijo Lindsay-Poland a Newsweek .
“Están utilizando un problema estructural para decir que es partidista y que los republicanos tampoco han logrado solucionar los motivos por los que la gente migra”, dijo Lindsay-Poland.
“Por eso creo que una estrategia eficaz para Harris es decir: mira, estás alimentando las razones por las que la gente está migrando y si no estás dispuesto a analizar eso, entonces eres una gran parte del problema”.
