La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, anunció este miércoles 10 de julio que su futuro gobierno construirá tres nuevas líneas de ferrocarril mediante un esquema de participación pública y privada.
La principal obra será la que unirá Ciudad de México (CDMX) con Nuevo Laredo, Tamaulipas, fronteriza con Estados Unidos; con una longitud de 1,143 kilómetros. A esta le seguirá una línea de la capital mexicana a Guadalajara, Jalisco, de 580 kilómetros, y una vía de 150 kilómetros que conectará el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) con la ciudad de Pachuca, en el central estado de Hidalgo, informó la próxima mandataria. En resumen, quedaría de la siguiente manera:
- Tren AIFA-Pachuca
- Tren México-Querétaro-Guadalajara
- Tren CDMX-San Luis Potosí-Monterrey-Nuevo Laredo
“Lo vamos a hacer (…) es una decisión que hemos tomado”, apuntó Sheinbaum en conferencia de prensa, donde subrayó que el objetivo es fortalecer la conectividad del país e impulsar “la generación de empleo vinculado con obra pública”.
LOS PROYECTOS TOMARÁN ENTRE CUATRO Y CINCO AÑOS
La construcción de las dos mayores rutas tomaría entre cuatro y cinco años, a tenor de la exjefa de Gobierno, cuyo equipo ya estudia los derechos de vía por donde correrán los trenes de pasajeros y que serán compartidos con ferrocarriles de carga operados actualmente por concesionarios privados.
En palabras de Sheinbaum, espera tener concluido este análisis antes de asumir el mando el próximo 1 de octubre y abocarse de inmediato a los procesos de licitación entre empresas interesadas en las obras.
“La idea es que sea un esquema similar al Tren Maya, en donde participen ingenieros militares y empresas privadas”, comentó.
El Tren Maya, cuya ruta rodea la península de Yucatán en el sureste de México, es una de las obras emblemáticas del saliente presidente Andrés Manuel López Obrador, por lo que el anuncio de Sheinbaum confirma la continuidad de la política de construir grandes proyectos ferroviarios, de acuerdo con analistas.
Los nuevos trenes estarán propulsados con energía eléctrica y su velocidad de crucero será de unos 160 kilómetros por hora, al igual que el Tren Maya. Además, Sheinbaum anticipó que “el objetivo es que los trenes se construyan en México”, país donde operan firmas fabricantes como CAF, CRRC, Alstom y Bombardier.
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