El expresidente salvadoreño Mauricio Funes ha sido condenado a 8 años de cárcel por el delito de casos especiales de lavado de dinero y de activos, informó la Fiscalía General.
El Tribunal 5° de Sentencia de San Salvador declaró culpable al exgobernante tras las evidencias presentadas en su contra, con las que se demostró que favoreció a una empresa guatemalteca para que se le adjudicara la construcción del puente San Isidro sobre el río Lempa.
En el listado de testigos de este proceso compareció Jaime Ramón Aparicio Mejía, empresario de nacionalidad guatemalteca acusado de cohecho (soborno), por ser el representante legal de la empresa Servicios Calificados de la Construcción S.A. (SERDELCO S.A.).
Se dijo que Aparicio habría entregado una avioneta a Funes a cambio de que le fuera adjudicado un proyecto para la construcción de un puente que estaba en proceso de licitación por valor de $8,487,716.94
Según las invetigaciones de la fiscalía, Funes habría entregadoa dicha empresa, en 2013, la adjudicación del proyecto de diseño y construcción de un puente que une importantes localidades de los centrales departamento de La Libertad y Chalatenango.
A cambio, Funes habría recibido un avión modelo King Air para uso de él y del empresario Miguel Menéndez Avelar, conocido como “Mecafe”, donde habrían viajado con sus familias a Estados Unidos, Costa Rica, Nicaragua, Panamá, Honduras y Guatemala.
Sobre el caso, el exgobernante salvadoreño cuestionó el proceso y dijo en su cuenta de X que “está claro que la FGR no tiene pruebas contundentes en mi contra ya que sigue buscando testigos a los que les ofrece el criterio de oportunidad para acusarme. Ya van 6 años de tener el caso ‘Saqueo Público’ en la etapa de Instrucción buscando supuestas pruebas y nada”.