Los rescatistas en el estado estadounidense de Texas buscaron el lunes cuerpos arrastrados por las inundaciones repentinas que mataron a más de 80 personas, incluidas 27 niñas y consejeros de un campamento de verano.
Mientras Texas se recupera de las históricas inundaciones, Camp Mystic confirmó que al menos 27 campistas y monitores murieron cuando el río Guadalupe creció más de 6 metros en menos de dos horas la madrugada del 4 de julio.

El campamento de verano femenino del condado de Kerr fue una de las zonas más afectadas, y los equipos de búsqueda siguen buscando a las niñas desaparecidas. Mientras tanto, el Servicio Meteorológico Nacional emitió una nueva alerta de inundación hasta las 19:00 del lunes, advirtiendo que las fuertes lluvias adicionales podrían provocar nuevas inundaciones repentinas en las regiones ya devastadas.
El campamento declaró: «Estamos destrozados junto con nuestras familias que sufren esta tragedia inimaginable. Oramos constantemente por ellos».
El director del campamento, Richard Eastland, y la consejera Chloe Childress se encuentran entre los muertos, se informó. Mientras, las operaciones de búsqueda y rescate continúan en todo el condado de Kerr y sus alrededores.

La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, dijo el lunes que el presidente Donald Trump está “plenamente comprometido” con la respuesta federal a las inundaciones mortales en el centro de Texas y está preparado para hacer “todo lo que pueda” para apoyar al estado.
Hablando en Fox & Friends , Noem describió la devastación como una “situación horrible” y dijo que visitó el área el sábado, reuniéndose con el gobernador Greg Abbott, los servicios de emergencia y las familias afectadas por el desastre, incluidos los padres de las niñas desaparecidas de Camp Mystic.

Las catastróficas inundaciones que azotaron el centro de Texas durante el fin de semana del 4 de julio se han convertido en uno de los desastres por inundación más mortíferos en Estados Unidos en los últimos 100 años.
Hasta el domingo por la noche, las autoridades confirmaron al menos 82 muertes y 41 personas seguían desaparecidas en seis condados, incluyendo a docenas de niños de campamentos de verano a orillas del río Guadalupe.