Los abogados del salvadoreño Kilmar Ábrego García, que fue deportado por error y luego regresó a Estados Unidos para enfrentar cargos de tráfico de personas, tomaron este viernes la inusual decisión de solicitar a la justicia que lo mantenga en prisión.
«La ironía de esta solicitud es evidente», dijeron los abogados de Ábrego García, cuyo caso se ha convertido en una prueba clave para las políticas de deportación del presidente Donald Trump.
Ábrego García, de 29 años, fue deportado sumariamente a una prisión de máxima seguridad en El Salvador en marzo y devuelto a Estados Unidos este mes para enfrentar cargos de tráfico de personas.
Dos magistrados afirmaron que el salvadoreño, que se encuentra detenido en Tennessee, puede ser puesto en libertad bajo fianza en espera de juicio.
Los fiscales federales se opusieron a su liberación por temor a que sea nuevamente detenido y deportado.
Ese temor llevó a los abogados de Abrego García a solicitar a la jueza Barbara Holmes que mantuviera preso a su cliente hasta la audiencia del caso, programada para el 16 de julio.
«Dado que no podemos confiar en ninguna declaración del Departamento de Justicia sobre este asunto, solicitamos respetuosamente posponer la emisión de la orden de liberación hasta la audiencia del 16 de julio», declararon.
«Una breve demora impedirá que el gobierno expulse a Abrego», añadieron.
Abrego García está acusado en Nashville, Tennessee, de tráfico de migrantes indocumentados entre 2016 y 2025.
El salvadoreño se declaró inocente y Holmes dijo en un fallo a principios de esta semana que la fiscalía no había presentado argumentos convincentes para que permaneciera detenido en espera de juicio.
Ábrego García vivía en Maryland hasta que se convirtió en una de las más de 200 personas enviadas a la prisión CECOT en El Salvador como parte de la ofensiva de Trump contra los migrantes.
La mayoría de los deportados sumariamente eran presuntos miembros de la pandilla venezolana Tren de Aragua, declarada por el gobierno estadounidense como organización terrorista extranjera.
Los abogados del Departamento de Justicia admitieron posteriormente que Ábrego García, quien está casado con una ciudadana estadounidense y desde 2019 gozaba de un estatus de protección, fue deportado debido a un «error administrativo».
