Los restos del poeta y premio nobel de Literatura guatemalteco Miguel Ángel Asturias serán repatriados desde París a Ciudad de Guatemala, anunció su familia este domingo, justo cuando se cumplen 50 años de su muerte.
“Hemos tomado la decisión de repatriar sus restos durante el gobierno de Bernardo Arévalo“, informó en un acto oficial de conmemoración Miguel Ángel Asturias Amado, hijo del escritor fallecido el 9 de junio de 1974.
El traslado “es una decisión que tiene un gran fondo afectivo” y que también lleva “una decisión política que estoy seguro que mi padre y mi hermano estarían de acuerdo”, exclamó en un emotivo discurso el hijo del también periodista y diplomático laureado con el Premio Nobel en 1967.
“La vida me ha dado la oportunidad de que 50 años después de haber tomado una decisión (de enterrarlo en París), hoy decida que sus restos vuelvan a Guatemala y cumplir sus deseos expresados en sus ‘Letanías al desterrado'”, sostuvo, al referirse al poema en el que el autor abordó su exilio en Argentina y luego en Europa.
El cadáver del nobel, nacido en 1899 y reconocido por mantener su compromiso con los indígenas y grupos marginados de su país, descansa en el Cementerio del Père Lachaise de la capital francesa, donde fue sepultado después de morir en España a causa de un cáncer.
Durante acto conmemorativo en el Palacio Nacional anuncian el retorno de los restos de Miguel Ángel Asturias al país.
Miguel Ángel Asturias, hijo, y el viceministro de Cultura, Rodrigo Carrillo, nos comparten su sentir en la conmemoración del fallecimiento de Asturias. pic.twitter.com/kfKQAP9yyQ
— Ministerio de Cultura y Deportes de Guatemala (@McdGuate) June 9, 2024
“Un honor”
Asturias hijo recordó que se negó a repatriar los restos de su padre ante la petición que le formularon los dos gobiernos que precedieron al de Arévalo, quien asumió el poder a inicios de 2024 por cuatro años.
Al intervenir en el acto, celebrado en el Palacio Nacional de la Cultura de la capital guatemalteca, el mandatario calificó de “un honor” la decisión y agradeció a la familia por permitir que “Miguel Ángel regrese a casa”.
“Asturias es más que un gran guatemalteco, es un artesano de nuestra identidad”, expresó el presidente en su discurso, en el que se le vio sensible y quebró en llanto.
“Hablar de Asturias es hablar de nuestra historia. Una historia vivida en carne propia en la lucha estudiantil contra la dictadura, en el servicio público, en la participación política activa y en el injusto y cruel exilio”, enfatizó, al denunciar que el autor fue “despojado de su nacionalidad, del derecho inalienable a llamarse guatemalteco”.
Sin embargo, durante el acto, al que también asistieron la vicepresidenta Karin Herrera y la premio nobel de la Paz Rigoberta Menchú, no se mencionó una fecha concreta de la repatriación.
Las autoridades, en cambio, emitieron en la conmemoración una declaratoria para que durante un año se rinda homenaje con diferentes actividades al insigne poeta, que tiene como su obra más célebre “El Señor Presidente” (1964), inspirada en la dictadura de José Manuel Estrada Cabrera (1898-1920).
Además, destacan su obra “Hombres de Maíz”, considerada la primera novela hispanoamericana del “Realismo Mágico”, y “Leyendas de Guatemala” (1930), su primer libro publicado y donde narra cuentos de origen maya.
Orgullo guatemalteco y referente cultural, Asturias nos dejó un legado literario inmortal. 🇬🇹✨ #AsturiasVive pic.twitter.com/sxqCwBJutp
— Gobierno Guatemala (@GuatemalaGob) June 9, 2024
Ejemplo de dignidad
“Asturias es un ejemplo de dignidad, y su regreso a Guatemala ahora que presenta cambios políticos, es una demostración de lo que debemos hacer en los nuevos tiempos que estamos viviendo en América Latina”, declaró a la AFP el poeta salvadoreño, Mauricio Vallejo.
Como único Nobel de literatura en Centroamérica, Asturias representó una “voz de denuncia” ante las injusticias de su tiempo, aseguró Vallejo, de 44 años, cuyo padre también poeta fue desaparecido durante la guerra civil salvadoreña (1980-1992).
“Trasladar los restos de Miguel Ángel a Guatemala es un hecho de justicia y reivindica a las comunidades indígenas históricamente marginadas del desarrollo”, comentó a la AFP el analista salvadoreño Eugenio Chicas.