El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reveló el miércoles que esperaba reunirse con el presidente ruso, Vladimir Putin, en Arabia Saudita para las conversaciones de paz en Ucrania, en un extraordinario deshielo en las relaciones después de una llamada telefónica sorpresa entre los dos líderes.
En su primer contacto confirmado desde el regreso de Trump a la Casa Blanca, el presidente estadounidense dijo que había mantenido una conversación “larga y muy productiva” con su homólogo ruso que ordenó la sangrienta invasión de Ucrania en 2022.
Pero la medida generó temores de que Ucrania quede fuera de las negociaciones sobre su propio destino después de que Trump dijera que el deseo de Kiev de unirse a la OTAN no era “práctico”, una demanda clave de Moscú.
Trump, que ha estado presionando para un rápido fin a la guerra de casi tres años, negó que Ucrania estuviera siendo excluida de las negociaciones directas entre las dos superpotencias con armas nucleares.
“Esperamos que él venga aquí, y yo iré allá, y probablemente nos reuniremos en Arabia Saudita la primera vez”, dijo Trump a los periodistas en la Oficina Oval sobre sus planes de reunirse con Putin.
Trump dijo que esperaba que esto sucediera “en un futuro no muy lejano” y agregó que el príncipe heredero saudí, el príncipe Mohammed bin Salman, quien jugó un papel clave en un intercambio de prisioneros entre Rusia y Estados Unidos esta semana, también estaría involucrado.
El Kremlin indicó que la llamada duró casi una hora y media. Los dos líderes acordaron que “ha llegado el momento de trabajar juntos” y que Putin invitó a Trump a Moscú, agregó.
Antes de asumir el cargo el 20 de enero, Trump había prometido poner fin a la guerra de Ucrania “en 24 horas”.
‘Hacer las paces’
Trump tomó al mundo por sorpresa cuando anunció la llamada telefónica en su plataforma Truth Social, diciendo que él y Putin “ambos estuvieron de acuerdo, queremos detener los millones de muertes que tienen lugar en la guerra con Rusia/Ucrania”, utilizando una cifra no confirmada para el saldo en el conflicto.
El presidente estadounidense dijo que acordaron “trabajar juntos muy estrechamente, incluyendo visitar los países de cada uno” y “que nuestros respectivos equipos inicien negociaciones inmediatamente” sobre Ucrania.
Más tarde, Trump llamó al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, quien no estuvo incluido en la llamada con Putin.
Zelensky dijo después que tuvo una llamada “significativa” con Trump en la que “compartió detalles” de sus conversaciones con Putin.
Trump dijo después de la conversación que Zelensky “como el presidente Putin, quiere hacer la paz”.
Andriy Yermak, jefe de la oficina presidencial de Kiev, dijo en comentarios televisados que Zelensky y Trump acordaron comenzar “inmediatamente” a trabajar en los equipos de alto nivel de cada lado que intentarán llegar a un acuerdo.
Los equipos “comenzarán un proceso de trabajo diario” y Zelensky y sus funcionarios se reunirán dentro de un día con funcionarios estadounidenses involucrados en la Conferencia de Seguridad de Munich, dijo Yermak.
Pero la llamada de Trump a Putin generó preocupaciones de que Estados Unidos estuviera aceptando los términos de Rusia.
El jefe del Pentágono, Pete Hegseth, dijo a sus homólogos europeos el miércoles que el sueño de Ucrania de volver a sus fronteras anteriores a 2014 era un “objetivo ilusorio” y que el deseo de Kiev de ser miembro de la OTAN “no era realista”.
Ambas son demandas claves de Moscú.
Trump negó que Zelensky estuviera siendo excluido y rechazó las críticas de que los comentarios de Hegseth significaban que Washington estaba aceptando las condiciones previas de Rusia.
Mientras tanto, Yermak reiteró la postura de Kiev de que “la independencia, integridad territorial y soberanía” de Ucrania no pueden ser objeto de concesiones.
El líder ucraniano pide a Washington garantías de seguridad estrictas como parte de cualquier acuerdo con Rusia. Mientras tanto, Trump ha sugerido un acuerdo para obtener tierras raras de Kiev a cambio de su ayuda militar continua.
‘Causas fundamentales’
Zelensky se reunirá con el vicepresidente estadounidense, JD Vance, y el secretario de Estado, Marco Rubio, el viernes en la Conferencia de Seguridad de Múnich, después de reunirse con el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, en Kiev el miércoles.
La declaración del Kremlin sobre la llamada con Trump fue más mesurada.
Dijo que Putin “estuvo de acuerdo con Trump en que se podría alcanzar una solución a largo plazo a través de negociaciones de paz”, pero dijo que quería “abordar las causas profundas del conflicto”, que Rusia atribuye a la influencia occidental en Kiev.
Hubo señales de un deshielo esta semana con un acuerdo de intercambio de prisioneros que vio a Moscú liberar al profesor estadounidense Marc Fogel y Bielorrusia liberar a un ciudadano estadounidense, mientras que Washington liberó al capo ruso de las criptomonedas Alexander Vinnik.
Trump ya había expresado su admiración por Putin y elogió al presidente ruso en su publicación en Truth Social. Dijo que Putin “incluso utilizó mi lema de campaña, que es muy fuerte: ‘SENTIDO COMÚN’”, y le agradeció por la liberación de Fogel.
Sin embargo, en Kiev y en las capitales europeas ha ido creciendo la preocupación sobre la forma que adoptará un posible acuerdo.
Los ministros de Asuntos Exteriores de Francia, Alemania y España insistieron el miércoles en que “no puede haber una paz justa y duradera” sin la implicación de Kiev y sus socios europeos.