Estados Unidos anunció el viernes la aprobación de la venta de más de 7.400 millones de dólares en bombas, misiles y equipos relacionados a Israel, que ha utilizado armas de fabricación estadounidense con efectos devastadores durante la guerra en Gaza.
El Departamento de Estado ha aprobado la venta de bombas, kits de guía y espoletas por valor de 6.750 millones de dólares, además de misiles Hellfire por 660 millones de dólares, según la Agencia de Cooperación de Seguridad de Defensa de Estados Unidos (DSCA).
La venta propuesta de bombas “mejora la capacidad de Israel para enfrentar las amenazas actuales y futuras, fortalece su defensa nacional y sirve como elemento disuasorio ante las amenazas regionales”, dijo DSCA en un comunicado.
Y la venta de misiles “mejoraría la capacidad de Israel para enfrentar las amenazas actuales y futuras al mejorar la capacidad de la Fuerza Aérea israelí para defender las fronteras de Israel, la infraestructura vital y los centros de población”, agregó.
Israel lanzó una ofensiva enormemente destructiva contra Hamás en Gaza en octubre de 2023 en respuesta a un ataque sin precedentes del grupo militante palestino ese mes.
La guerra ha devastado gran parte de Gaza, un estrecho territorio costero en el Mediterráneo, provocando el desplazamiento de gran parte de su población, pero desde el mes pasado está en vigor un alto el fuego que pone fin al conflicto mortal y permite la liberación de rehenes capturados por Hamás.
En respuesta a las preocupaciones por las muertes de civiles, la administración del entonces presidente Joe Biden bloqueó un envío de bombas de 2.000 libras a Israel (más grandes que las de la última venta propuesta), pero su sucesor, Donald Trump, habría aprobado el envío después de regresar al cargo.
Aunque el Departamento de Estado aprobó la venta de bombas y misiles, las transacciones aún deben ser aprobadas por el Congreso, que probablemente no bloqueará el suministro de armas al aliado más cercano de Washington en Medio Oriente.