Tres exfuncionarios de los gobiernos de los partidos ARENA y FMLN, así como dos personas más, fueron enviadas a juicio por un tribunal de El Salvador bajo los cargos de negociar con pandillas a cambio de votos durante los procesos electorales de 2014 y 2015.
El Juzgado Segundo de Instrucción encontró suficientes méritos para someter a un proceso judicial a los exministros de Gobernación y Justicia, Arístides Valencia y Benito Lara, así como al exalcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, quien está en prisión por otros cargos.
La misma resolución incluye a dos personas acusadas de ser los intermediarios entre las pandillas y partidos políticos: el columnista de origen alemán, Paolo Lüers y el salvadoreño Wilson Alvarado. Los cinco enfrentarán vista pública en uno de los seis tribunales de sentencia de San Salvador.
Como resultado de la audiencia preliminar desarrollada este martes, el juez ordenó la detención de Arístides Valencia, Paolo Luers y Wilson Alvarado. Mientras que Benito Lara seguirá con medidas sustitutivas a la detención y el exalcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, continuará en la cárcel.
La Fiscalía General de la República los acusa de agrupaciones ilícitas y fraude electoral, delitos que abrían cometidos cuando supuestamente se reunieron con los cabecillas de la Mara Salvatrucha y pandilla 18 para pedirles que los miembros de dichas agrupaciones votaran por sus candidatos a la presidencia en las elecciones del 2014, así como legislativas y municipales del 2015.
El exministro de justicia, Benito Lara, asegura que no se realizaron reuniones con pandillas y que no hubo ningún ilícito, por lo cual buscará probar su inocencia en el juicio.
“Instituciones que verifican los procesos electorales nunca dijeron nada, o sea que daban por hecho que las cosas se habían realizado de manera correcta, y seis años después viene la acusación”, expresó Lara tras la resolución.
El juez admitió al ministerio público la prueba ofrecida, consistente en escuchas telefónicas, videos donde los políticos aparecen reunidos con los cabecillas de las pandillas, declaración de los criteriados “Noé” y “Salomón”, solo que de Salomón al no ser ubicado se admitió su entrevista.
Los testigos han dicho que el FMLN pagó $433,000 a las pandillas para que sus familiares y pandilleros votaran por Salvador Sánchez Cerén en las elecciones presidenciales de 2014. ARENA habría entregado $100,000 y en el caso de Muyshondt, el supuesto pago se cifra en $69,000 a cada una de las pandillas.