¿Sientes un dolor punzante en el cuello o la espalda después de pasar mucho tiempo frente a una computadora o al celular? Esta molestia tiene un nombre específico: síndrome de cuello de texto, también conocido como text-neck.
Según datos de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos (NLM, por sus siglas en inglés), este problema afecta al 73 por ciento de los estudiantes universitarios y al 64.7 por ciento de las personas que trabajan frente a un monitor. Pero ¿qué implica exactamente este término?
“Se trata de un problema de salud pública a nivel mundial. La evidencia actual muestra que el uso inadecuado de computadoras y dispositivos móviles guarda una posible relación con el desarrollo de diversos síntomas clínicos que definen el síndrome de cuello de texto”, señala un artículo de la biblioteca médica más grande del mundo.
De acuerdo con los datos epidemiológicos, 39.2 por ciento de quienes reportan este padecimiento reconoce una disminución en su productividad debido al dolor. Desde la perspectiva biofísica, el síndrome surge por la pérdida de la curva natural de la columna cervical, una consecuencia de la postura inclinada que la cabeza mantiene de forma prolongada sobre los hombros.
Sin embargo, este peso se eleva a 18 kilos con una inclinación de 30 °, y hasta 27 kilos cuando alcanza los 60 °.
EL SÍNDROME DE CUELLO DE TEXTO PUEDE OCASIONAR CEFALEAS Y ANSIEDAD
El síndrome de cuello de texto provoca dolor cervical acompañado de tensión muscular, cefaleas, irritabilidad y ansiedad. También pueden presentarse molestias visuales, como fatiga ocular (astenopía), resequedad en los ojos (xeroftalmia) y miopía.
En el plano psicológico, suelen surgir síntomas como estrés y depresión. Cuando esta condición se vuelve crónica, puede causar desgarros musculares y degeneración osteomuscular en la zona cervical. En casos severos, podría ser necesario recurrir a procedimientos quirúrgicos como la discectomía anterior y la artroplastia, según advierte la Revista Médica Herediana.
El text-neck puede ser diagnosticado y evaluado por fisioterapeutas o incluso por autopercepción, con una estimación de la frecuencia del dolor de cuello. La evaluación temprana de la población de alto riesgo para presentar este síndrome se basa en la historia clínica, el examen clínico y las imágenes de la postura.
“Esta tendencia, que se intensificó durante los años más críticos de la pandemia, es especialmente notable en América Latina, donde se registran algunos de los tiempos de navegación más elevados entre los países analizados”, indica Statista.
En México, por ejemplo, los individuos pasan en internet siete horas y 37 minutos al día; mientras que en Brasil la cifra es de nueve horas y 13 minutos.
RECOMENDACIONES ANTE EL DOLOR DE CUELLO Y ESPALDA
La NLM establece que la terapia para el síndrome de cuello de texto incluye un programa de ejercicios específicos en casa de 10 semanas que puede mejorar la alineación postural relacionada con la postura adelantada de la cabeza.
“Otros tratamientos eficaces pueden incluir ejercicios posturales, tareas oculomotoras, cinta postural, ejercicios respiratorios y correcciones ergonómicas para el profesional, así como para el entorno doméstico”, apunta.
Además, si el trabajo implica pasar horas frente al ordenador, los médicos recomiendan hacer descansos frecuentes, durante los cuales es recomendable levantarse y caminar por unos minutos.
De igual manera, algunos estiramientos de cuello y espalda ayudan a prevenir lesiones y alivian el dolor en esa zona. Entre ellos se encuentran:
- Estiramientos laterales inclinando la cabeza hacia los lados, lo que alarga el trapecio.
- Movimientos de la cabeza hacia adelante y hacia atrás.
- Movimientos del cuello en rotación, para las cervicales.
- Estiramiento de los músculos pectorales, dorsales e interescapulares.