La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) autorizó por primera vez la comercialización de un análisis de sangre destinado a diagnosticar la enfermedad de Alzheimer en personas que ya presentan síntomas.
Se trata del primer test sanguíneo aprobado oficialmente para detectar esta enfermedad, según informó la agencia en un comunicado de prensa emitido el viernes.
De acuerdo con la Clínica Mayo, el alzhéimer es la causa más común de demencia. Es el proceso biológico que comienza con la aparición en el cerebro de una acumulación de proteínas en forma de placas amiloides y ovillos neurofibrilares. Esto hace que las neuronas cerebrales mueran con el tiempo y el cerebro se encoja.
“Sabiendo que uno de cada 10 adultos mayores de 65 años sufre alzhéimer, y que se espera que esa proporción se duplique para el año 2050, tengo la esperanza de que innovaciones médicas como esta beneficien significativamente a los pacientes”, expresó el comisionado de la FDA, Martin A. Makary.
Aunque no hay cifras actualizadas, en El Salvador hasta el 2024 se reportaban oficialmente 68,807 personas diagnosticadas con esta enfermedad, la cual se ha presentado en personas mayores a 65 años.
Se estima que en México aproximadamente 1 millón 300,000 personas padecen la enfermedad de Alzheimer, cifra que representa entre 60 y 70 por ciento de los diagnósticos de demencia y afecta con mayor frecuencia a las personas mayores de 65 años.
UNA NUEVA ERA PARA DIAGNOSTICAR ALZHÉIMER
La nueva prueba está diseñada para crear resultados de diagnóstico más accesibles y disminuir la dependencia de pruebas más invasivas, como las tomografías por emisión de positrones (PET).

La nueva prueba, conocida como “Lumipulse G pTau217/ß-Amyloid 1-42 Plasma Ratio”, detecta placas amiloides a través de análisis de sangre, un tipo de proteína indicativa del alzhéimer, explicó la Asociación de Alzheimer en un comunicado de prensa del viernes.
Estas placas se pueden ver en los pacientes a través de una tomografía por emisión de positrones (TEP), según la FDA. La Clínica Mayo descubrió una forma de prevenir la acumulación de dichas proteínas hace casi una década, lo que significa que pueden identificarse y tratarse más rápidamente con el último dispositivo.
Esta herramienta no es la primera que se utiliza en ensayos clínicos, pero sí en recibir la autorización de la FDA para su comercialización. “Si bien la prueba no pretende ser exhaustiva, debería ayudar a los profesionales médicos en parte de sus prácticas de diagnóstico más amplias para el tratamiento del alzhéimer”, afirma el comunicado de prensa de la FDA.