La Corte Suprema de Estados Unidos impidió al presidente Donald Trump reanudar la expulsión de migrantes venezolanos hacia la cárcel de máxima seguridad de El Salvador bajo los cargos de ser pandilleros y amparándose en una ley del siglo XVIII, en un fallo emitido este viernes 16 de mayo.
En marzo el mandatario republicano invocó la Ley de enemigos extranjeros de 1798, usada hasta entonces solo en tiempos de guerra, para expulsar a presuntos pandilleros venezolanos a una megaprisión de El Salvador, que se prestó a encarcelarlos a cambio de dinero.

Trump los acusa de ser miembros de la banda Tren de Aragua, declarada organización “terrorista global” por Washington. La Corte Suprema, integrada por nueve magistrados, de los cuales tres son progresistas, intervino por primera vez en este caso el 19 de abril para bloquear las deportaciones sumarias de migrantes venezolanos en situación irregular a El Salvador.
Doble golpe legal
En realidad, la administración Trump sufrió un doble golpe legal el viernes: Primero, el Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito de Estados Unidos, con sede en Boston, se negó a levantar la orden judicial que bloqueaba la rápida deportación de inmigrantes ilegales a un país distinto al suyo, como El Salvador o Libia.
A este se sumó la decisión de la Corte Suprema de 7-2 para bloquear la solicitud de la administración de reanudar la deportación rápida de ciudadanos venezolanos utilizando la Ley de Enemigos Extranjeros.
En su fallo, el Tribunal de Apelaciones del Primer Circuito de Estados Unidos dijo que tenía “preocupaciones” sobre los planes de la administración Trump con respecto a las deportaciones a un país distinto del lugar de ciudadanía de un inmigrante y “el daño irreparable que resultará de las expulsiones injustas en este contexto”.
“Se cierra el grifo del uso del CECOT”
En El Salvador, un experto en política internacional consultado por el periódico La Prensa Gráfica, consideró que “esta resolución le pone un paro a la megacárcel internacional en que pretendían convertir al CECOT”.
Aunque el analista en relaciones internacionales, Napoleón Campos, estima que “esto no es una derrota definitiva para Trump”, sí cree que es “un freno constitucional inapelable”.
Según el experto, la decisión de la Corte representa también una derrota indirecta para el gobierno salvadoreño, que ha permitido el ingreso de al menos 287 migrantes, mayoritariamente venezolanos, al Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), bajo un acuerdo no revelado con la administración Trump.
El gobierno de El Salvador, a través del vicepresidente Félix Ulloa, ha defendido públicamente el ofrecimiento del sistema penitenciario nacional como un “servicio de alojamiento penitenciario”, comparándolo incluso con servicios turísticos o médicos que el país podría ofrecer.

En EEUU, la abogada y directora ejecutiva de la Alianza Nacional de Litigios de Inmigración, Trina Realmuto, celebró la decisión del Primer Circuito de la Corte de Apelaciones de Estados Unidos.
En un comunicado, dijo: “Estas protecciones son especialmente importantes dado que ahora sabemos que la semana pasada el gobierno buscaba activamente deportar personas a Libia”.
La reacción de Trump
El presidente Trump y sus aliados conservadores han expresado su furia por los fallos del viernes, lo que aumenta la posibilidad de una confrontación más amplia entre Trump y elementos del poder judicial.
En su sitio web Truth Social, Trump escribió: “La Corte Suprema acaba de dictaminar que los peores asesinos, narcotraficantes, pandilleros e incluso aquellos con problemas mentales que ingresaron ilegalmente a nuestro país no pueden ser expulsados sin pasar por un proceso legal largo, prolongado y costoso, que posiblemente tomará muchos años para cada persona y que les permitirá cometer numerosos delitos antes siquiera de ver un tribunal”.

Añadió que “el resultado de esta decisión permitirá que más criminales ingresen a nuestro país, causando un gran daño a nuestro querido pueblo estadounidense”.
“La Corte Suprema de Estados Unidos no me permite hacer lo que me eligieron para hacer. El soñoliento Joe Biden permitió que millones de extranjeros delincuentes entraran a nuestro país sin ningún proceso, pero para expulsarlos, tenemos que pasar por un proceso largo y tedioso. ¡Este es un día malo y peligroso para Estados Unidos!”, dijo el presidente Trump.
Tras las elecciones de noviembre de 2024, en las que los republicanos consiguieron la Casa Blanca y una mayoría en ambas cámaras del Congreso , los tribunales han surgido como uno de los principales impedimentos para la agenda política de la segunda administración Trump.
El gobierno ha sufrido derrotas legales en una variedad de cuestiones, incluido el despido de trabajadores federales en período de prueba, la congelación de miles de millones de dólares en ayuda exterior y la prohibición de que personas transgénero sirvan en el ejército.
En el caso particular de la denominada Ley de Enemigos Extranjeros, promulgada en 1798, la normativa ha sido criticada por su antigüedad y por el riesgo de vulnerar garantías constitucionales. Precisamente esa fue la ley utilizada para enviar a más de 250 venezolanos a El Salvador y que están recluidos en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), en Tecoluca, zona central de El Salvador.