El arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, y la organización de derechos humanos Tutela Legal “María Julia Hernández” lamentaron la impunidad en la que permanecen los asesinatos de líderes religiosos ocurridos durante el conflicto que vivió el país.
El pronunciamiento de la iglesia se produce en el marco del aniversario número 48 del asesinato de los beatos salvadoreños, el padre Rutilio Grande, Manuel Solórzano y Nelson Rutilio Lemus, perpetrado en 1977 por el grupo paramilitar de extrema derecha llamado ‘los escuadrones de la muerte’, relacionados con el Ejército
La organización de derechos humanos Tutela Legal “María Julia Hernández” publicó en sus redes sociales que el Estado de El Salvador “protege” a los “autores intelectuales” del asesinato del padre Rutilio Grande.
Tras “48 años de su martirio, el Estado salvadoreño sigue protegiendo a los autores intelectuales de este crimen de lesa humanidad”, dijo la agrupación en el marco del 48 aniversario del hecho.
#MemoriaHistorica Este día, conmemoramos y reivindicamos el martirio del Padre Rutilio Grande, Manuel Solórzano y el joven Nelson Rutilio Lemus. El padre Grande fue un ferviente seguidor de Jesús, de la fe y la justicia e impulsó el Concilio Vaticano II en la Iglesia salvadoreña.… pic.twitter.com/OIIsQlF0ne
— Tutela Legal MaríaJH (@TutelaLegalMJH) March 12, 2025
Por su parte, El arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, cuestionó públicamente que todos los casos de asesinatos de sacerdotes, religiosas, laicos y catequistas de la Iglesia Católica siguen en la impunidad y que no ha existido justicia para ellos.
“Estamos para cumplir 50 años del martirio de nuestros mártires aquí presentes porque fue en el 77, eso quiere decir que en 2027 serían 50 años”, dijo el prelado.
“No se sabe nada de los asesinos, nada. San Óscar le exigió al gobierno que aclarara este punto, no se aclara. Y ninguno de los asesinatos de todos los sacerdotes, las religiosos, los laicos, los catequistas, ninguno se ha aclarado. Quedan impunes, tristemente, no hay justicia, no hay verdad”, reprochó el miércoles el arzobispo salvadoreño durante la misa de aniversario.
El asesinato de Grande y sus compañeros, que lo acompañaban el día del hecho, se dio a las puertas de la guerra civil salvadoreña (1980-1992), que en 12 años de conflicto interno se saldó con 75,000 muertos y 8,000 desaparecidos.
El religioso se dirigía a la remota localidad de El Paisnal (norte) su lugar de nacimiento y donde vivía, a celebrar un acto religioso cuando fue emboscado y asesinado.
Escobar Alas también reveló que en la lista de las mártires en proceso de canonización está la secretaria del padre Grande, Ercilia Martínez, quien fue asesinada después junto a su prima, Corina Martínez. Su error fue: haber estado cerca del sacerdote.
El 1 de octubre de 2023, la iglesia reveló que había 47 procesos de canonización de mártires del conflicto armado, y entre estos, los sacerdotes arquidiocesanos, las cuatro monjas de Estados Unidos, Maura Clarke, Ita Ford, Dorothy Kazel y la misionera Jean Donovan, así como Luis Torres, un niño que era acompañante del padre Alfonso Navarro, asesinados en mayo de 1977.
Hasta el momento, se desconoce si la Fiscalía salvadoreña investiga el asesinato de Rutilio Grande y sus compañeros.