Cuatro años después de la muerte de Diego Maradona, comienza este martes en Argentina el juicio a siete profesionales de la salud para determinar sus responsabilidades en el fallecimiento de la leyenda del fútbol.
Tras varias postergaciones, la primera audiencia está prevista para las 09H30 locales (12H30 GMT) en los tribunales de la localidad de San Isidro, una ciudad satelital al norte de Buenos Aires, y se espera que el juicio dure al menos hasta julio.
Siete miembros del equipo médico de Maradona están imputados por «homicidio simple con dolo eventual», es decir sin premeditación pero en el que el victimario sabe que podría ocasionarle la muerte a alguien e igualmente continúa con su accionar. Los acusados arriesgan entre ocho y 25 años de prisión.
Durante el proceso declararán cerca de 120 testigos, entre familiares, peritos y médicos de Maradona a lo largo de los años, dijeron las partes a la AFP.

El carismático jugador falleció el 25 de noviembre de 2020 a los 60 años, a causa de una crisis cardiorrespiratoria mientras cumplía una internación domiciliaria en su residencia particular en Tigre, al norte de Buenos Aires, tras una cirugía en la cabeza por un hematoma.
Según la autopsia, el héroe del Mundial de 1986 con la Albiceleste murió por «edema pulmonar agudo secundario e insuficiencia cardíaca crónica agravada».
Maradona padecía múltiples patologías: problemas renales, hepáticos, insuficiencia cardíaca, deterioro neurológico y dependencia del alcohol y psicofármacos.
Su muerte conmocionó al mundo deportivo y fue llorada por millones de argentinos. Hubo tres días de duelo nacional y se realizó un multitudinario y emotivo velatorio en el palacio presidencial.

La causa
Enfrentarán al tribunal el neurocirujano Leopoldo Luciano Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Ángel Díaz, la médica coordinadora Nancy Forlini, el coordinador de enfermeros Mariano Perroni, el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna y el enfermero Ricardo Omar Almirón.
Los cinco hijos de Maradona y sus hermanas son querellantes en la causa.
La enfermera Dahiana Gisela Madrid, la octava acusada, será juzgada de forma separada al término de este proceso, en un juicio por jurados a pedido de su defensa.
Los fiscales consideraron en la acusación que el ídolo del argentino Boca Juniors y el italiano Nápoles se encontraba «en situación de desamparo» y «librado a su suerte», sin la atención debida ante la gravedad del cuadro: «Hay un cúmulo de conductas penalmente relevantes que condujeron a Maradona a su triste fallecimiento», afirmaron.