Se están creando más espacios para la detención de inmigrantes en todo Estados Unidos a medida que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) busca intensificar sus operaciones bajo el mandato del presidente Donald Trump .
El miércoles, el ICE anunció que se volverá a poner en funcionamiento una instalación que había cerrado en Nueva Jersey con 1.000 camas . El jueves por la mañana, uno de sus principales contratistas, CoreCivic, anunció que se crearía espacio adicional en sus centros de detención de Ohio, Nevada, Oklahoma y Mississippi.
La medida se produce en un momento en que también se está estudiando la posibilidad de utilizar bases militares estadounidenses como instalaciones temporales.
Los anuncios se producen después de que el director interino del ICE, Caleb Vitello, fuera despedido por el presidente Donald Trump, quien, según se informa, no estaba satisfecho con el ritmo de arrestos y deportaciones de inmigrantes ilegales, que prometió durante su campaña electoral. La administración se ha visto presionada por los votantes en las redes sociales, que no están contentos con las cifras que el ICE ha promocionado hasta ahora.
El ICE tiene una capacidad limitada y en su informe anual de 2024 señaló que solo tenía fondos para 41.000 camas, mientras que más de 7 millones de inmigrantes estaban en su lista en un momento dado. El informe indicó que el Congreso necesitaba proporcionar fondos adicionales para ampliar la capacidad y aumentar los niveles de personal en el futuro.
Tras el regreso de Trump a la Casa Blanca, anunció una ampliación de la capacidad de detención con 30.000 camas en la Bahía de Guantánamo, en Cuba, mientras que su jefe de la frontera, Tom Homan, ha repetido que el Congreso necesita financiar el trabajo del ICE. El presupuesto del Partido Republicano incluye más de 170.000 millones de dólares para ayudar en la lucha contra la inmigración ilegal.
¿Hacia dónde se está expandiendo ICE?
Las instalaciones de Delaney Hall en Newark serán operadas por uno de los principales contratistas de ICE, GEO Group, que firmó un contrato de 15 años que estima tendrá un valor de alrededor de mil millones de dólares durante ese tiempo.
ICE anunció la ampliación de 1.000 camas el miércoles, promocionándola como la primera en abrir bajo la nueva administración, pero se estaban llevando a cabo conversaciones para volver a poner la instalación en uso durante el mandato del expresidente Joe Biden.
En una declaración, el director interino saliente de ICE, Caleb Vitello, dijo que la ubicación del sitio cerca del Aeropuerto Internacional Newark Liberty ayudaría a la agencia a agilizar los procesos de deportación.
GEO Group es una de las dos principales empresas penitenciarias privadas que utiliza el ICE, junto con CoreCivic, para gestionar sus centros de detención. En diciembre, GEO dijo que planeaba invertir 70 millones de dólares en la expansión, con especial atención a las instalaciones del ICE.
El jueves, CoreCivic también anunció que varios sitios obtendrían camas adicionales: se agregarán 784 camas para detenidos de ICE en su Centro Correccional del Noreste de Ohio, el Centro de Detención del Sur de Nevada y su Instalación Correccional Cimarron en Oklahoma.
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En otros lugares, el gobierno federal está buscando ampliar el espacio de detención mediante el uso de bases militares, incluida la de Fort Bliss en Texas, según un memorando del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) al que tuvo acceso NPR. La instalación allí también podría albergar hasta 1.000 inmigrantes inicialmente, pero esa capacidad podría ampliarse a 10.000 camas con el tiempo.
El memorando mostró que hasta otras 10 instalaciones podrían usarse como centros de detención, incluidas la Base Conjunta McGuire-Dix-Lakehurst en Nueva Jersey, la Estación de Reserva Aérea de las Cataratas del Niágara cerca de Buffalo, Nueva York, la Base de la Fuerza Aérea Hill en Utah y la Base de Reserva Aérea Homestead cerca de Miami, dijo NPR.
El uso del espacio de la Bahía de Guantánamo para albergar a inmigrantes con órdenes finales de deportación fue un anuncio sorprendente del presidente a finales de enero. Desde entonces, alrededor de 200 personas han estado detenidas temporalmente en el lugar, y la mayoría de ellas han sido deportadas a Venezuela.
Los grupos de derechos de los inmigrantes han demandado a la administración Trump por esta medida, argumentando que a quienes se encuentran detenidos allí se les ha negado el acceso a asistencia jurídica y el contacto con sus familias. A pesar de la insistencia en que los “peores de los peores” serían los detenidos allí, se ha informado de que también se trasladó allí a deportados sin otros antecedentes penales.
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La administración Biden también utilizó instalaciones temporales en sitios militares para dar la bienvenida a los recién llegados tras la retirada de Afganistán.
También estaba buscando activamente ampliar instalaciones durante el último año aproximadamente antes de las elecciones presidenciales, con sitios en California, Nuevo México y el estado de Washington entre las opciones, según múltiples solicitudes FOIA de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU).
¿Puede ICE detener a todos los inmigrantes?
En resumen, no. La agencia ha dicho en repetidas ocasiones en sus informes que tiene un espacio limitado para alojar a sus reclusos. Incluso si la prisión de Guantánamo alcanza el objetivo del Presidente de 30.000 camas, ni siquiera duplicaría la capacidad actual.
Muchos inmigrantes ilegales son detenidos durante un breve período de tiempo (unos 40 días en promedio) antes de ser liberados o expulsados del país. Si son liberados, se les puede dar una etiqueta GPS, pero muchos simplemente son incluidos en la lista de no detenidos a la espera de audiencias o de su expulsión definitiva.
La cuestión se planteó durante los debates sobre las leyes Laken Riley y Justicia para Jocelyn en el Congreso. Ambas exigen que el ICE detenga a muchos más inmigrantes ilegales , lo que genera preocupación por la posibilidad de que algunos delincuentes violentos sean liberados en las comunidades como resultado de ello.
Lo que dicen los involucrados
Vitello, en un comunicado de prensa sobre Delaney Hall: “La ubicación cerca de un aeropuerto internacional agiliza la logística y ayuda a facilitar el procesamiento oportuno de las personas bajo nuestra custodia mientras cumplimos con el mandato del presidente Trump de arrestar, detener y expulsar a los extranjeros ilegales de nuestras comunidades”.
El alcalde de Newark, Ras J. Barakas, en una declaración a Newsweek : “Sin satisfacer los requisitos de uso de la propiedad, las inspecciones y los permisos de la ciudad, Delaney Hall no puede abrir legalmente en Newark en este momento. Independientemente del proceso, un centro de detención de inmigrantes no es bienvenido aquí. La intención declarada del ICE de acorralar a los ‘criminales’ es un velo delgado que no oculta su plan para violar los derechos de las personas, profanar la Constitución y desmantelar nuestra democracia”.
George C. Zoley, presidente ejecutivo de GEO, en un comunicado de prensa: “Nuestra instalación Delaney Hall, propiedad de la empresa, desempeñará un papel importante en la provisión de los espacios de detención y los servicios de apoyo necesarios para el ICE en el noreste. Seguimos preparándonos para lo que creemos que es una oportunidad sin precedentes para ayudar al gobierno federal a cumplir con sus prioridades ampliadas de control de la inmigración”.
Es probable que la administración Trump busque capacidad y recursos adicionales para continuar su impulso a las deportaciones masivas en los próximos meses.