Al menos 66 personas murieron el martes tras el incendio que devastó un hotel de una estación de esquí en el noroeste de Turquía, indicó el ministro del Interior.
Testigos dijeron que los huéspedes desesperados habían tratado de escapar usando cuerdas, las imágenes mostraron sábanas colgando de las ventanas y los informes de los medios sugieren que algunos habían muerto después de intentar saltar a un lugar seguro.
Varios ministros llegaron al lugar del incendio en el complejo turístico de Kartalkaya, a unos 170 kilómetros (100 millas) al noroeste de la capital, Ankara, y las autoridades dijeron que el incendio ya estaba contenido.
“Nuestro dolor es enorme”, dijo el ministro del Interior, Ali Yerlikaya, a los periodistas en Kartalkaya. “66 ciudadanos perdieron la vida y otros 51 resultaron heridos”.
El incendio se produjo a las 3H27 (00H27 GMT) en el hotel Grand Kartal, de 12 plantas y revestimiento de madera, indicó.
El ministro añadió que se registraron unos 238 huéspedes alojados en el hotel, un pico durante las vacaciones escolares de dos semanas.
La cadena privada NTV dijo que entre los muertos había tres personas que habían saltado desde las ventanas del hotel.
Se cree que el incendio comenzó en el restaurante y se propagó rápidamente, aunque no estaba inmediatamente claro qué lo causó.
Una parte de la estructura da a un acantilado, lo que dificulta que los bomberos combatan el incendio.
Escuché gritos
El presidente Recep Tayyip Erdogan interrumpió su discurso en el congreso de su partido gobernante, el AKP, en Ankara, diciendo: “Nuestro dolor es grande, nuestro dolor es grande”.
Dijo que se han iniciado investigaciones administrativas y judiciales para determinar la causa del incendio.
“Se tomarán todas las medidas necesarias para arrojar luz sobre todos los aspectos del incidente y exigir responsabilidades a los responsables”, prometió.
Las imágenes de televisión mostraron enormes columnas de humo elevándose hacia el cielo con una montaña cubierta de nieve detrás del hotel.
“Escuché gritos alrededor de la medianoche, los residentes (del hotel) gritaban pidiendo ayuda”, dijo Baris Salgur, quien trabaja en un hotel cercano, a la cadena de televisión NTV.
“Pidieron una manta, dijeron que iban a saltar. Hicimos lo que pudimos, llevamos cuerdas, almohadas, llevamos un sofá. Algunas personas se tiraron cuando las llamas se acercaron a ellas”.
‘Sin seguridad’
Las imágenes muestran el vestíbulo del hotel destrozado, con fragmentos de vidrio en el suelo, el mostrador de recepción y los muebles de madera del interior carbonizados.
Las autoridades advirtieron que el edificio podría derrumbarse.
Un sobreviviente que logró escapar de las llamas dijo a los medios locales que no sonó ninguna alarma en el hotel cuando comenzó el incendio y se quejó de la falta de medidas de seguridad, incluidas escaleras contra incendios o detectores de humo.
El ministro de Turismo, Nuri Ersoy, dijo que el hotel tenía dos salidas de incendio.
Las imágenes revelaron sábanas colgando de las ventanas del hotel, lo que indica que algunos las ataron para escapar del incendio.
El ministro de Justicia, Yilmaz Tunc, dijo que se habían asignado seis fiscales para investigar el incendio.
Los evacuados fueron realojados en hoteles cercanos.
Con información de AFP
