El Salvador cumplió este jueves 33 años de la firma de los Acuerdos de Paz que en 1992 pusieron fin a 12 años de guerra civil entre el FMLN, Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (ahora partido político de oposición) y el Gobierno de Alfredo Cristiani.
Ningún acto oficial se llevó a cabo por sexto año consecutivo debido a que el gobierno de Nayib Bukele califica los acuerdos de “farsa”.
En 2021, Bukele decretó el fin de las conmemoraciones de los acuerdos de paz liderados por la ONU.
“De ahora en adelante, por decreto presidencial, el 16 de enero será el “Día de las Víctimas del Conflicto Armado”, consignó Bukele por medio de Twitter.
De ahora en adelante, por decreto Presidencial, el 16 de enero será el “Día de las Víctimas del Conflicto Armado”.
Dejaremos de conmemorar a los que ordenaron sus muertes y empezaremos a conmemorar a quienes sí deben ser conmemorados.
Así empezaremos a construir la paz. pic.twitter.com/trFSvJxati
— Nayib Bukele (@nayibbukele) January 17, 2021
En enero de 2022, la Asamblea Legislativa aprobó un decreto para reconocer el 16 de enero como el Día Nacional de las Víctimas del Conflicto Armado, pero tampoco ningún evento oficial fue organizado para la ocasión.
El vicepresidente del país, Félix Ulloa, ha declarado públicamente sobre los Acuerdos de Paz que estos “terminaron en estafa” y no piensa “ni que hay que conmemorarlos, ni que hay que honrarlos”.
Sin embargo, el exprocurador de Derechos Humanos David Morales considera que en el país se ha dado continuidad a una “política de discriminación” contra las víctimas del conflicto armado, desde que “los crímenes fueron cometidos”.
Subrayó que la Administración de Bukele “se ha caracterizado por un esfuerzo de manipulación de la historia”, porque “trata de manipular el tema de los crímenes del conflicto armado para lograr réditos políticos y propaganda”.
Por su parte, varias organizaciones de la sociedad civil realizaron este domingo una marcha conmemoración del 33 aniversario de la firma de los Acuerdos de Paz y aprovecharon para exigir que se derogue la recién aprobada ley que permite el retorno de la minería metálica.
Grupos como el Bloque de Resistencia Popular, el Movimiento de Víctimas del régimen de excepción (MOVIR), la Unidad de Defensa de los Derechos Humanos y Comunitarios de El Salvador (Unidehc), entre otros, participaron en la actividad pública.
En esta manifestación participaron familiares de presos bajo el régimen de excepción que portaban pancartas con las imágenes de los detenidos que aseguran son inocentes y exigiendo su liberación.
La guerra civil, que se produjo por la injusticia social, el cierre de los espacios de participación política y la represión militar dejó más de 75.000 muertos, 7.000 desaparecidos y pérdidas millonarias a la economía.
Con los acuerdos de paz se readecuó el sistema judicial, se crearon nuevas instituciones de derechos humanos y tres cuerpos de seguridad fueron declarados proscritos y reemplazados por una nueva policía civil.
El ejército se sometió al poder político, 7.900 combatientes del FMLN se desarmaron y la organización conformó un partido político que gobernó el país entre 2009 y 2019.