La oposición de la iglesia católica a que se permita la minería metálica en El Salvador es aguda y tiene una historia basada en la protección del medio ambiente, el mismo que el gobierno asegura que será protegido con una “extracción responsable” de recursos que reducirá los impactos ambientales.
La Conferencia Episcopal de El Salvador expresó esta semana su oposición al plan del presidente Nayib Bukele de reintroducir la minería metálica en el país, prohibida desde 2017, para potenciar el crecimiento económico.
“Con el mejor deseo para todos, expresamos nuestro no rotundo, a la explotación minera en el país”, señaló la Conferencia en un comunicado.
Los doce obispos firmantes se declararon “muy preocupados” por la “posible activación de la explotación minera”, prohibida por ley por impulso de asociaciones ambientalistas y de la Iglesia católica.
Bukele anunció recientemente que pedirá al Congreso, controlado por su partido, que derogue esa ley, pues según un estudio cuya autoría no reveló, en el país existen yacimientos de oro valorados en 131.000 millones de dólares, equivalentes “al 380% del PIB”.
“La práctica de cualquier tipo de minería” traería “consecuencias irreversibles contra la salud y la vida de la población”, advirtió la Conferencia, encabezada por el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar.
En sintonía con los ambientalistas, los obispos indicaron que la extracción minera podría terminar “contaminando” ríos y mantos acuíferos por el uso de productos químicos como cianuro, arsénico, mercurio y ácido sulfúrico.
Una gran preocupación es que la extracción de oro contamine el río Lempa, que atraviesa la zona de potencial minero presentada por Bukele y que abastece de agua al 70% de los habitantes de la capital y ciudades aledañas.
“Estamos a favor del desarrollo económico, sin embargo, la más grande riqueza de un pueblo es la vida de las personas y su salud; eso vale más que todo el oro del mundo”, sostuvo la Conferencia Episcopal.
La minería metálica en El Salvador fue prohibida por ley en marzo de 2017 tras más de una década de lucha y un esfuerzo conjunto de organizaciones sociales, ambientales, educativas y el peso decisivo de la Iglesia católica.
“El acompañamiento de la cúpula de la Iglesia católica y el clero puso una presión social sin precedentes que facilitó y aceleró el proceso”, le aseguraba a BBC Mundo en esas fechas, Jeannette Aguilar, directora del Instituto Universitario de Opinión Pública (Iudop) de la Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas” (UCA).
La Iglesia junto a la UCA y organizaciones sociales presentaron a comienzos de febrero de ese año el proyecto de ley y en marzo entregaron ante la Asamblea Legislativa más de 33.000 firmas de personas que apoyaban la aprobación de este.
De acuerdo con una encuesta realizada por el Iudop en 2016, el 77% de la población consideraba que el Estado debía prohibir la minería metálica.
Bukele pide confianza y dice que la prohibición es “absurda”
El presidente Nayib Bukele calificó de “absurda” la prohibición total de la minería metálica en el país, vigente desde 2017 y asegura que El Salvador podría aprovechar económicamente la explotación de sus depósitos de oro que podrían generar un desarrollo económico significativo y sin precedentes para la nación.
El gobernante salvadoreño pidió la confianza en su Gobierno para permitir la minería metálica, porque, a su juicio, la extracción de estos recursos podría hacerse de forma responsable, reduciendo los impactos ambientales y generando grandes beneficios económicos.
“Lo vamos a hacer bien y vamos, no a cuidar el medio ambiente, vamos a mejorar el medio ambiente”, dijo el mandatario a la prensa.
“Necesitamos hacer una explotación responsable de nuestros recursos naturales, como lo hacen todos los países del mundo”, agregó Bukele, quien citó como ejemplos a Catar, Israel, Canadá y Suiza, y apuntó que “no hay un país que haya hecho una tontería así” de prohibir la minería.
Agregó que “han confiado en nosotros en las otras reformas que hemos hecho, (…) confíen en nosotros en esto” y “si lo hacemos mal, nos castigan en las elecciones”.