Un número récord de turistas ha acudido al Pueblo de Papá Noel en Rovaniemi, la capital de la Laponia finlandesa, en medio de crecientes preocupaciones sobre el efecto del exceso de turismo.
El parque temático de invierno, ubicado al borde del Círculo Polar Ártico y famoso por ser considerado la “ciudad natal oficial de Santa Claus“, atrae a más de 600.000 visitantes al año, y el número de turistas aumenta aún más durante la Navidad.
Ahora los visitantes superan a la población de la ciudad en más de 10 veces durante la temporada navideña, lo que crea desafíos de vivienda y ejerce presión sobre la infraestructura.
Muchos apartamentos en el centro de la ciudad, que antes estaban destinados a uso residencial, ahora se alquilan a turistas durante la temporada alta.

¿Están expulsando a los residentes de Rovaniemi?
Algunos residentes locales piden a las autoridades que apliquen mejor las leyes finlandesas que prohíben el uso de edificios residenciales para alojamiento comercial.
La alcaldesa Ulla-Kirsikka Vainio reconoció las presiones del turismo, pero dijo que muchos residentes se benefician económicamente de los alquileres a corto plazo. “Algunas personas ganan mucho dinero con los alquileres a corto plazo”, dijo, indicando que la cuestión consiste en equilibrar las ganancias económicas con las preocupaciones de la comunidad.
A pesar de las crecientes tensiones, es poco probable que la reputación de Rovaniemi como destino turístico de primer nivel desaparezca en el corto plazo.

Uno de los paisajes de la ciudad que atrae al turismo, considerado excesivo y que también ha elevado los precios de alquiler
Para turistas como Joy, de Bangkok, la oportunidad de vivir la magia de la Navidad y contemplar la aurora boreal hace de Rovaniemi el destino ideal. “Es Navidad y nos encantaría ver la aurora boreal”, afirma. “Rovaniemi parece un buen lugar”.
¿Se enfrentan otros destinos turísticos europeos populares a los mismos desafíos?
La situación de Rovaniemi refleja desafíos similares observados en toda Europa en ciudades como Barcelona, Ámsterdam y Florencia, donde el creciente número de visitantes ha abrumado la infraestructura y provocado un aumento de los costos para los residentes.

Mientras la ciudad enfrenta los desafíos que plantea el turismo de masas, encontrar un equilibrio sostenible entre el crecimiento económico y la calidad de vida de los residentes será esencial para el futuro de Rovaniemi.