Un juez penal de Guatemala ordenó este jueves la cancelación del partido político del presidente Bernardo Arévalo, pero el congreso bloqueó la medida con una reforma legal.
El Congreso guatemalteco reformó una ley que permitirá habilitar al partido político Semilla del presidente Bernardo Arévalo, suspendido por un juez por supuestas irregularidades en su inscripción en medio de una arremetida de la Fiscalía contra el mandatario.
La reforma a la Ley contra el Crimen Organizado, apoyada por 127 de los 160 diputados, impide que un juez suspenda o cancele a partidos políticos, como se establecía en la anterior normativa, dijo el diputado oficialista, Samuel Pérez.
En agosto de 2023, luego de que Arévalo pasó sorpresivamente a segunda ronda electoral, el juez Fredy Orellana, sancionado por Washington por considerarlo “corrupto y “antidemocrático”, aplicó esa ley para suspender la personalidad jurídica de Semilla supuestamente por presentar firmas falsas en su inscripción en 2017.
Esa ley permitía la suspensión provisional de “las inscripciones de personas jurídicas” cuando “hubieren sido utilizadas para cometer” un “hecho ilícito”, que Orellana atribuyó a las supuestas firmas falsas, aunque juristas sostienen que ese caso debía ser ventilado por el tribunal electoral.
La Fiscalía, encabezada por Consuelo Porras, también sancionada por Estados Unidos, encabeza una ofensiva contra Arévalo y su partido, que pusieron en peligro la toma de posesión del presidente en enero.
En cumplimiento de la orden judicial emitida por Orellana, el Tribunal Supremo Electoral inhabilitó a Semilla el 3 de noviembre del año pasado.
Ahora las reformas establecen que esa ley no es aplicable a las organizaciones políticas, que están sujetas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos y no al ámbito penal.
“Les estamos diciendo a los golpistas ‘ya no más uso de artimañas legales para perseguir a la oposición política’”, dijo el congresista oficialista José Carlos Sanabria, al referirse a Orellana y Porras.
Sanabria señaló que “hoy el Movimiento Semilla comienza a recuperar sus facultades”, pues ninguno de sus 23 diputados podía presidir la junta directiva ni comisiones de trabajo del Congreso.
El presidente Arévalo asegura que Porras, el fiscal Rafael Curruchiche y el juez Orellana han encabezado una persecución en su contra por su promesa de combatir la corrupción.
