El precio del café arábica alcanzó este miércoles su máximo nivel en casi medio siglo, principalmente por la creciente preocupación sobre la cosecha en Brasil, primer productor mundial, afectado por una grave sequía y por semanas de incendios.
La libra de arábica que cotiza en Nueva York alcanzó 3,20 dólares, un precio al que no llegaba desde 1977. El aumento fue de casi un 70% desde inicios de año, cuando se cotizaba en torno a 1,90 dólares.
El alza de los precios está sobre todo relacionada con la oferta en América Latina, pero también en algunos países africanos, explicó el analista John Plassard. “Las previsiones de producción no son muy buenas para los próximos seis meses”, subrayó.
Las subidas se explican por los temores de “malas cosechas debido a condiciones climáticas adversas” a principios de año, especialmente en Brasil, el mayor productor y exportador de café, y de arábica en particular, profundizó Jack Scoville, analista de Price Futures Group.
En este país latinoamericano, la cosecha se vio afectada este verano por incendios de una magnitud inédita, la mayoría de origen criminal según las autoridades.
Las llamas arrasaron durante varias semanas desde la Amazonia en el norte hasta el sur del país, alentados por una sequía histórica, que los expertos atribuyen en parte al calentamiento global.
La “tensa situación de las reservas en Brasil para 2024-25 y la posibilidad de una decepcionante cosecha brasileña en 2025-26” están creando tales temores que los precios siguen subiendo, señaló John Plassard, analista de Mirabaud.
Factores geopolíticos
El precio del café también se ha visto afectado por factores geopolíticos, como las interrupciones del transporte marítimo en el Mar Rojo, los posibles aranceles estadounidenses tras la elección de Donald Trump y la futura regulación de la Unión Europea sobre deforestación.
“En este contexto de incertidumbre, los agricultores están optando por vender apenas lo necesario, lo que limita la oferta de café”, indica Guilherme Morya, de Rabobank.
Estos temores sobre la oferta también afectan a Vietnam, primer países productor de café robusta, usado por ejemplo para el café instantáneo.
Esta variedad, que cotiza en Londres, está en torno a los 5.200 dólares la tonelada. A mediados de septiembre alcanzó un precio récord de 5.829 dólares, un nivel inédito desde el año 2008.
Este precio no se veía desde la década de 1970, según Bloomberg, que se basó en datos de archivo.
El alza de los precios repercutirá en los consumidores, que verán subir el coste de su café. “Está claro que esto va a tener un gran impacto” desde principios del próximo año, cuando las empresas empiecen a negociar sus contratos de café, indicó el analista Plassard.
Nestlé, propietaria de las cápsulas Nespresso, Nescafé y Starbucks que se venden en los supermercados, ya había anunciado en noviembre que subiría los precios y reduciría el tamaño de sus dosis ante la erosión de sus márgenes, informó Bloomberg.
El grupo J.M. Smucker, propietario de las marcas Folgers, Dunkin y Café Bustelo, que figuran entre las más vendidas en Estados Unidos, ya aplicó una primera subida de precios en junio en determinadas marcas, seguida de una segunda en octubre en toda su cartera.
El Salvador
Al igual que el petróleo, el café es una de las materias primas que se cotizan en bolsa a través del Contrato C, que reúne a 19 países productores de arábica suave, incluyendo a El Salvador. Sin embargo, este instrumento es extremadamente volátil y está a merced del vaivén del mercado.
Una nota del Instituto Salvadoreño del Café (ISC) señala que la cotización del aromático se debe a la preocupación en el mercado del impacto prolongado de una severa sequía en Brasil. “Esta situación ha perjudicado a los cafetos durante la crucial etapa de floración, reduciendo las expectativas de la próxima cosecha de café arábiga en este país suramericano”, sostuvo.
El café es el segundo producto de origen agrícola que más exporta El Salvador después del azúcar. El Banco Central de Reserva (BCR) reporta que las ventas al mercado exterior del grano dejaron ingresos de $129.3 millones de enero a octubre, con una caída de $13.9 millones (9.7 %) frente a los resultados de igual período de 2023.
Con información de AFP