Israel aprobó una ley que prohíbe las actividades de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos en su territorio, por lo que se enfrenta a una protesta internacional; mientras, continúan los mortíferos bombardeos en la sitiada Franja de Gaza y el Líbano.
Un ataque israelí dejó más de 55 muertos, según informaron los servicios de emergencia, el martes por la mañana en Beit Lahia, en el norte de la Franja de Gaza, donde el ejército lleva a cabo operaciones aéreas y terrestres contra Hamás.
La guerra que se libra desde hace más de un año en territorio palestino se extendió en septiembre al Líbano, donde Israel lucha contra Hezbolá, aliado de Hamás y apoyado como este por Irán.
A pesar de la oposición de Estados Unidos y de una advertencia del Consejo de Seguridad de la ONU, el Parlamento israelí adoptó el lunes por abrumadora mayoría un texto que prohíbe “las actividades de la UNRWA en territorio israelí”, incluida Jerusalén Este, ocupada y anexada por Israel.
Un segundo texto prohíbe a los funcionarios israelíes trabajar con la UNRWA y sus empleados, lo que debería perturbar considerablemente las actividades de la agencia, considerada la “columna vertebral” de la ayuda humanitaria en Gaza.
Israel controla estrictamente toda entrada de ayuda internacional a Gaza, vital para sus 2,4 millones de habitantes afectados por una catástrofe humanitaria.
Varias capitales europeas han denunciado esta prohibición, al igual que la ONU y la Organización Mundial de la Salud.
Israel ha acusado a empleados de la UNRWA de haber participado en la masacre perpetrada en su suelo por el movimiento islamista palestino el 7 de octubre de 2023.
El jefe de la Unrwa, Philippe Lazzarini, denunció esta prohibición que, según él, “agravará el sufrimiento de los palestinos”.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo que temía “consecuencias devastadoras” si se aplicaran las dos leyes.
“No queda nada en el hospital”
En la Franja de Gaza, la Defensa Civil anunció que un ataque israelí a un edificio de cinco pisos dejó “más de 55” muertos y decenas de heridos en Beit Lahia durante la noche.
Preguntado por la AFP, el ejército israelí afirmó que estaba examinando esta información.
Los restos de 15 personas fueron trasladados al hospital Kamal Adwan, explicó a la AFP su director, Houssam Abou Safia, añadiendo que 35 heridos, la mayoría niños, estaban siendo tratados en el hospital.
“Seguimos recibiendo mártires y heridos”, continuó, “en el hospital Kamal Adwan no queda nada más que primeros auxilios, ahora que el ejército ha detenido a nuestro equipo médico.
“La mayoría de las víctimas son mujeres y niños. La gente intenta salvar a los heridos, pero no hay hospitales ni atención médica adecuada”, dijo a la AFP Rabie al Chandagly, un hombre de 30 años.
El ejército israelí lleva a cabo operaciones en el norte de Gaza desde el 6 de octubre, afirmando querer impedir que los combatientes de Hamás se reagrupen allí. El martes afirmó que había matado a “unos 40 terroristas” en el sector de Jabalia.
Según el ejército, los bombardeos aéreos también tuvieron como objetivo el centro del territorio y Rafah, en el sur.
La guerra fue desencadenada por el ataque sin precedentes perpetrado el 7 de octubre de 2023 por Hamás contra Israel, que provocó la muerte de 1.206 personas, en su mayoría civiles, según un recuento de la AFP basado en datos oficiales israelíes, incluidos rehenes asesinados o fallecidos en cautiverio. .
En represalia, Israel prometió acabar con el movimiento palestino en el poder en Gaza desde 2007 y lanzó una ofensiva que mató al menos a 43.020 palestinos, en su mayoría civiles, según datos del Ministerio de Sanidad del gobierno de Hamás, considerados fiables por la ONU.
Incursión en profundidad
Desde hace más de un mes, la guerra se extiende al Líbano, donde Israel lleva a cabo una campaña de ataques aéreos contra Hezbolá desde el 23 de septiembre, además de una ofensiva terrestre lanzada el 30 de septiembre en el sur del país.
Los tanques israelíes penetraron el martes a seis kilómetros de la frontera, cerca de la aldea de Khiam, en su incursión más profunda en territorio libanés desde el inicio de la guerra, según la agencia de noticias libanesa Ani.
La fuerza aérea también bombardeó el sur del Líbano, tras los ataques de la víspera contra la ciudad costera de Tiro y el este del país, que dejaron decenas de muertos.